La Fiscalía pidió ayer la condena a una multa de 240 euros para cada uno de los seis policías locales y tres trabajadores de la contrata de basuras Acciona denunciados por una falta contra el orden público. Los hechos se remontan al 25 de abril cuando supuestamente interrumpieron un pleno al mostrar su torso desnudo decorado con lemas reivindicativos. El fiscal asegura que se produjo una falta leve «de consideración y respeto a sus superiores». En este caso, al alcalde, Eduardo Dolón (PP), quien presidía el pleno.

Los tres abogados defensores pidieron la absolución porque consideran que el derecho a la libertad de expresión, el de manifestación y libertad sindical, se sitúa de forma preferente sobre el que supuestamente se vulneraba y que si hubo desorden éste no tuvo relevancia penal. El Ayuntamiento no está personado en la causa.

El inspector que realizó el atestado, Manuel Antonio López Vera, explicó que no fue testigo de los hechos y que realizó el informe a instancias del intendente principal, con la aportación de los tres agentes que estaban de servicio en el pleno, informaciones de medios de comunicación y el vídeo de la sesión que, por cierto, ayer no se pudo visionar por incompatibilidad entre el software del juzgado y el archivo aportado.

Pacífica

De los tres agentes en servicio el que estaba al mando explicó que la protesta enmarcada en la entrada de unas 40 personas al salón se hizo de forma pacífica, sin gritos ni alteraciones del orden, con la salvedad de que se pusieron en pie y mostraron el torso desnudo. Incluso explicó que fue el primer edil el que motivó la interrupción al pedir a los manifestantes que desalojaran el salón. Otro de los agentes de puerta sí aseguró que Dolón se vio obligado a intervenir por la actitud de estos, mientras que el tercero indicó que prácticamente no presenció la secuencia porque estaba en el acceso. Uno de los trabajadores de Acciona denunciados defendió que no hubo alteración del orden porque se oía perfectamente la intervención del concejal de Los Verdes José Manuel Dolón mientras ellos mostraban sus reivindicaciones y que fue el alcalde el que interrumpió a ese edil para apercibirles a ellos, que estaban en silencio, para que dejaran el salón de plenos. El edil acudió como testigo y secundó la versión de los denunciados que explicaron al juez que emplearon su libertad de expresión dando «un paso más» para llamar la atención del alcalde ante su negativa a dialogar tras meses de protesta «enquistada» y que su acción nunca tuvo como objetivo alterar el orden del pleno.