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Las empresas públicas agravan la asfixia del Consell con unas pérdidas de 420 millones

La Sindicatura de Comptes certifica que RTVV acumuló números rojos de 54,7 millones en 2014

Las empresas públicas agravan la asfixia del Consell con unas pérdidas de 420 millones

Las empresas públicas de la Generalitat se han convertido en otro quebradero de cabeza para el Consell de Ximo Puig. Por si la Generalitat no tenía poco con su infrafinanciación, el agravio de las inversiones estatales y su elevado volumen de deudadeuda a causa de los préstamos del rescate, ahora se ha vuelto a constatar que su sector público no está contribuyendo, ni de lejos, a paliar su asfixia financiera. Más bien, todo lo contrario. El informe de fiscalización de la Sindicatura de Comptes, presentado esta semana en las Cortes, ha sacado a relucir que las empresas dependientes de la Generalitat finiquitaron el ejercicio 2014 con unas pérdidas de 420,7 millones de euros. La cifra, con todo, es inferior a la que se ha venido registrando durante los últimos años. Así, por ejemplo, 2012 se despidió con unos números rojos de 898 millones en las firmas del Consell, mientras que en 2013 las pérdidas fueron de 577,7 millones.

El origen de este descenso radica en el gobierno de Alberto Fabra. Cuando el expresidente asumió el timón del Ejecutivo por la dimisión de Francisco Camps mediado 2011 -envuelto entonces en la causa de los trajes de Gürtel, de la que salió absuelto- decidió meter la tijera en el sector público empresarial. Aprobó Expedientes de Regulación de Empleo (ERE), aceleró el proceso de liquidación de mercantiles y fundaciones, y no le tembló el pulso para cerrar Ràdio Televisió Valenciana (RTVV), históricamente uno de los principales agujeros en las cuentas.

Ahora bien, pese a todos esos ajustes, el desfase presupuestario de las empresas públicas continúa golpeando de lleno el balance de la Generalitat. Así lo constata la propia Sindicatura en su prolijo informe.

De nuevo, Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) se ha convertido en la firma que presenta un mayor desequilibrio. De acuerdo con la información recogida en el documento del órgano fiscalizador, la mercantil encargada de las líneas del tranvía despidió 2014 con un resultado negativo de 148 millones de euros, más de una tercera parte de las pérdidas de todo el sector público empresarial. Los 55,4 millones que ingresó por ventas -principalmente de billetes- no dieron siquiera para cubrir los gastos de personal -65,9 millones de euros-.

La segunda mercantil con más desfase presupuestario fue la Entidad de Infraestructuras de la Generalitat (EIGE), creada para el desarrollo de las políticas autonómicas en materia de vivienda e infraestructuras. Sus pérdidas fueron de 84 millones.

En el tercer lugar del podio aparece, todavía, RTVV. Pese a que Canal 9 y Ràdio 9 dejaron de emitir el 29 de noviembre de 2013, la televisión y la radio públicas costaron a las arcas del Consell 54,7 millones en 2014. El mayor gasto del ente correspondió a salarios, con unos gastos de 37,5 millones. A esas cifras se suman, además, otros 8,9 millones de pérdidas del Ente Público RTVV, otra mercantil surgida de la reestructuración.

Estas tres empresas no han sido las únicas que han contribuido a agrandar el agujero de las pérdidas. Las firmas ligadas a los grandes eventos también lo han hecho. Así, por ejemplo, la Ciudad de la Luz siguió costando dinero al Ejecutivo autonómico pese a que no acogió ni un solo rodaje durante 2014. El informe de la Sindicatura de Comptes constata que el recinto cinematográfico acumuló unas pérdidas de 12,1 millones durante el ejercicio. Y eso que se encuentra en proceso de venta -la UE deberá decidir si acepta la propuesta del Consell y autoriza la transacción en un solo lote- y su actividad es nula.

La Sociedad Proyectos Temáticos, la que se creó para canalizar los grandes proyectos, acumuló un agujero mucho mayor. En concreto, de 40,8 millones. Y el Aeropuerto de Castellón, por su lado, cerró el año con unos números rojos de 4,2 millones. Al final, las empresas públicas perdieron 420,7 millones.

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