Tensión en Oriente Medio

EEUU se desvincula del ataque de Israel a Irán y el G7 insiste en evitar una escalada

Los ministros de Exteriores de las democracias más ricas del mundo emplazan al régimen de los Ayatolás a "cesar su relación" con la milicia palestina de Hamás o la libanesa Hizbulá

Vista de la reunión de ministros de Exteriores del G7.

Vista de la reunión de ministros de Exteriores del G7. / EFE

Irene Savio

'Ucrania, Israel, Ucrania, Israel'. Los dos argumentos (casi monotemáticos) de la actualidad internacional dominan este viernes otra tensa reunión del G7. El encuentro, que reúne a los ministros de Asuntos Exteriores del grupo, ha sido interrumpido a media mañana por la noticia del ataque de represalia de Israel contra Irán, lo que tuvo como efecto inmediato que se cambiase la agenda para discutir del asunto y que los participantes saliesen a ofrecer sus declaraciones públicas. Declaraciones que, sin embargo, repiten lo dicho en los pasados días: el llamamiento a evitar otra escalada en la región. En la primera reacción pública de EEUU al ataque, su secretario de Estado, Antony Blinken, afirmó además que su país "no se ha involucrado en operacion ofensiva alguna" contra Irán.

Refiriéndose al ataque israelí, Antonio Tajani, el ministro italiano, anfitrión del evento, ha sido uno de los primeros en hablar. En el documento final de la reunión, el G7 afirma que “apoya la seguridad de Israel pero invitamos a todas las partes a trabajar para evitar una desescalada”, ha dicho el italiano, después de la agresión de Tel Aviv, casi parafraseando lo ya afirmado después del anterior ataque iraní contra Israel el pasado domingo. 

A Teherán le pedimos de poner fin a su sostén a Hamas y Hizbolá, y no se excluye la posibilidad de adoptar sanciones y otras medidas”, ha añadido Tajani. “El G7 no será un espectador”, ha avisado, al añadir que Italia es uno de los países que mantiene contactos diplomáticos con Irán. En cuanto a las sanciones, “cada país decidirá de forma distinta” en los próximos días, ha añadido, al precisar que aún así la cumbre ha decidido establecer una colaboración “permanente” entre los ministerios del grupo para estar en contacto “día a día”.

Con algunos minutos de diferencia habló el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, cuya intervención había suscitado gran expectación en los 300 periodistas acreditados en la reunión. “Repito una vez más que queremos evitar un alargamiento del conflicto, por eso seguramente le pedimos a todas las partes de evitar acciones demasiado extremas", afirmó Blinken.

En esta línea, EEUU y “el G7 se han comprometido para que Irán se asuma sus responsabilidades”, dijo el funcionario estadounidense. “EEUU ayer aprobó nuevas sanciones contra Irán y el G7 asimismo estableció, que si fuera necesario, también se establecerán nuevas sanciones”, añadió. "También seguiremos manteniendo el foco en Gaza. Necesitamos que lleguen más ayudas a Gaza. Hemos visto algunos avances, pero necesitamos resultados más concretos y sólidos", precisó, al añadir que otra prioridad es llegar a un cese el fuego. "El único obstáculo es Hamas, que parece más interesado en un conflicto en la región", argumentó.

Titubeos sobre Ucrania

Más enredada ha parecido la cuestión ucraniana. Después de que el alto representante para Política Exterior de la UE, Josep Borrell, sugiriera en los pasados días a los países europeos de usar sus arsenales para enviar los sistemas antidefensas que Kiev necesita desesperadamente, algunos respondieron categóricamente que eso no ocurrirá. 

"No podemos depender solamente de los Estados Unidos. Debemos asumir nuestras propias responsabilidades. Tenemos los Patriot, tenemos sistemas antimisiles. Debemos sacarlos de nuestros depósitos, donde están para cualquier eventualidad, y enviarlos a Ucrania donde la guerra está en marcha", declaró Borrell. "Y estoy seguro de que lo haremos, pero debemos hacerlo rápido", añadió, en unas declaraciones en línea con las de Jens Stoltenberg, el secretario general saliente de la OTAN. 

Una solicitud, esta, que no ha caído bien, por ejemplo, a Italia, que posee sistemas SAMP-T y que ha sugerido que necesita de sus misiles para proteger a su país. Aún así, “tenemos que dejar claro a Rusia que el apoyo a Ucrania por parte de Occidente no se acabará ni a largo plazo”, matizó posteriormente Tajani.

Marcha propalestina

En tanto, en la cercana ciudad de Nápoles, que se conecta con Capri con un barco, se ha también llevado a cabo la prevista manifestación propalestina para pedir el fin de las hostilidades en Gaza. Un evento que había puesto en alerta a las autoridades, pero que finalmente se llevó a cabo de forma pacífica.