El último vestigio del tren Chicharra ha regresado a Villena, a la ciudad donde se construyó a mediados del siglo XX, en los talleres de la compañía de los Ferrocarriles de Villena a Alcoy y Yecla, ubicados en la capital del Alto Vinalopó. La pieza es una cabina del autovía Ybern número 20 que desde 1950 y hasta mediados de 1969 prestó sus servicios en las líneas ferroviarias que unían Villena, Alcoy y Cieza, el conocido popularmente como tren «Chicharra» por su singular ruido.
Los villenenses Julio Guillén Domene, Jerónimo Lázaro Milán, Juan María Milán y el recientemente fallecido Gabriel Sarrió González adquirieron en Valencia esta pieza del coleccionista y restaurador de trenes y tranvías Luciano Vañó. Asimismo han sufragado los gastos de su desplazamiento y será Juan García Santa quien proceda a su restauración, con el fin de que se exhiba en el futuro Museo de la Ciudad, junto con otras piezas que este grupo de villenenses ha podido recuperar.
Guillén, Lázaro y Milán esperan que en el año 2019, y coincidiendo con el cincuenta aniversario del cierre de la línea del ferrocarril, esté restaurada la cabina y que el Ayuntamiento haya conseguido la cesión de las naves de cocheras y el edificio de la estación del VAY, propiedad de ADIF.
No obstante, lamentan que hasta la fecha en la población no se le haya hecho un homenaje a este tren «que dio trabajo a muchas familias, formó a buenos artesanos y técnicos, transportó correo y mercancías, generó riqueza para las comarcas por donde circulaba, unió pueblos y personas», señalan.
El empeño de este grupo de villenenses, que también pertenecen al colectivo cultural El Salicornio, por recuperar el patrimonio del Chicharra comenzó hace meses. En abril solicitaron al alcalde de Villena, Javier Esquembre, que mediara para que la localidad recuperase el coche salón de lujo de la compañía que data de la inauguración de la línea en 1884 y destinado al servicio de la dirección y viajeros importantes. Un vagón que pertenece a Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana, que pretende exponerlo en Altea en un museo sobre el Trenet de la Mariana en la ciudad.
Así en desde el pasado mes de mayo en el Museo Arqueológico José María Soler de Villena se ha habilitado una vitrina con piezas del Chicharra donadas por el director de la línea ferroviaria, Miguel Ybern; un semáforo donado por Andrés Menor; un farol para iluminar las vías de José Monargues; carnets donados por Julio Guillén, así como un libro de nóminas de 1966, de Juan María Milán. «Además, en el Museo se proyecta un audiovisual con el último viaje que realizó en 1969 la línea del Chicharra y que salió de la estación de cabecera que estaba situada en Villena», afirmó la directora del museo Laura Hernández.
El objetivo es que en el futuro Museo de la Ciudad en el edificio de la Electroharinera se habilite un espacio para mostrar la historia del «Chicharra» en Villena.
