Varias piezas utilizadas en el «Chicharra», la línea ferroviaria de unía Villena, Alcoy y Yecla y que se creó en 1884, se exhiben por primera vez en el «Museo Arqueológico José María Soler» en la capital del Alto Vinalopó.

La directora del museo, Laura Hernández, subrayó que con el avance de las obras de rehabilitación del antiguo edificio de la Electroharinera para albergar el Museo de la Ciudad, «se han ido incrementando las donaciones de particulares de elementos que tenían en sus casas del Chicharra, ya que consideran que estarán mejor conservadas y custodiadas».

Por este motivo, en el Museo Arqueológico se ha habilitado una vitrina con varias de estas piezas, «a la espera de que se construya el Museo de la Ciudad donde se mostrarán más elementos de esta línea ferroviaria», afirmó la directora del Museo, Laura Hernández.

La intención es habilitar una sala en el Museo de la Ciudad- la primera fase está prevista que concluya en septiembre- dedicada al Chicharra».

Entre las piezas que se muestran destaca el único teléfono ubicado en la estación del «Chicharra» en Villena donado por el director de la línea ferroviaria, Miguel Ybern; un semáforo donado por Andrés Menor; un farol para iluminar las vías de José Monargues; carnets donados por Julio Guillén, así como un libro de nóminas de 1966, de Juan María Milán. «Además, en el Museo se proyecta un audiovisual con el último viaje que realizó en 1969 la línea del Chicharra y que salió de la estación de cabecera que estaba situada en Villena», afirmó Hernández.

A pesar de que hace cuarenta y siete años que la línea ferroviaria se clausuró, el «Chicharra» permanece en el imaginario de los villenenses.

La directora del Museo Arqueológico agradeció las numerosas donaciones realizadas de elementos del antiguo tren, «que constituyen el vestigio del pasado de un paisaje cultural muy arraigado. El tren unía a una serie de poblaciones -desde Cieza hasta Alcoy- y socialmente era muy popular». También agradeció el trabajo que están llevando a cabo Jerónimo Lázaro, Julio Guillén y Juan María Milán para la recuperación de dos piezas del tren, un automotor y el vagón que utilizaba el director de la línea. Unas piezas que espera exhibir en el Museo de la Ciudad.