El rediseño del carril bici de Elche, obsoleto, y con muchos puntos negros, ya ha empezado. La empresa Miracer ha dado el pistoletazo de salida a las obras que ha impulsado la Concejalía de Movilidad Urbana para acabar con el principal punto negro del trazado actual, el que se encuentra en la avenida del Ferrocarril. Esta actuación, que supone una inversión de 241.000 euros, financiados por la Diputación de Alicante, es la primera de una serie de proyectos que pretenden mejorar y actualizar el carril bici de Elche.
El primer tramo en el que se va a actuar es el que va desde el Parque Infantil de Tráfico hasta la rotonda donde está el IES Misteri d'Elx y la Estación de Autobuses. Por el momento, queda excluido el tramo que discurre por la vía de servicio de la estación de Renfe Elx-Parc. Este pequeño tramo se hará con inversión municipal más adelante, ya que se está a la espera de que Renfe, que es la propietaria de la vía, autorice la obra.
El proyecto ya está en marcha y los operarios han empezado a trabajar esta semana en la zona más próxima al IES Misteri d'Elx.
Esta primera actuación se va a desarrollar en una superficie con una longitud total de 1.730 metros (645,15 metros en dirección oeste y 680,20 metros en dirección este, más los carriles de las rotondas que tienen una longitud de 185,4 y 218,6 metros).
Se trata de un carril bici unidireccional por cada uno de los dos sentidos de la circulación, un carril bici por la banda norte en el sentido este-oeste y otro carril bici por la banda sur en el sentido oeste-este. La ruta se integra en la calzada en todos los tramos posibles, y donde no es factible discurre en el extremo de la acera cercano a la calzada.
El objetivo de las obras es establecer un nueva ordenación con una mejor integración de esta infraestructura en la circulación de la avenida. Se busca integrar a la bicicleta de manera más lógica y natural en el tráfico.
Además, se pretende dotar a este medio de transporte de unas condiciones de seguridad y garantizar una buena convivencia entre ciclistas, conductores de vehículos a motor y peatones. En el recuerdo están las continuas quejas de los usuarios de bicicletas y peatones, que se veían obligados a circular por la misma acera en todo el tramo, con el peligro que eso suponía.
La edil de Movilidad Urbana, Esther Díez, reconocía ayer que «nos encontramos con un carril bici obsoleto que tiene necesidad de ser rediseñado y actualizado». En este sentido, desde la Mesa de Movilidad, en la que se integran numerosos colectivos ciudadanos, se determinó que el principal punto negro era el carril bici de la avenida del Ferrocarril, donde convivían peatones y ciclistas en un espacio muy pequeño y con mucha densidad, con los consiguientes conflictos. Como consecuencia, éste es el primer punto en el que se lleva a cabo un rediseño del carril bici.
Convivencia
Con esta actuación, que durará unos cuatro meses, se pretende garantizar una buena convivencia entre ciclistas, peatones y vehículos a motor. Por ello, apuntó Esther Díez, «el carril bici en esta avenida pasa a discurrir en buena parte por la calzada, como vehículo que es, y restando el mínimo espacio posible al peatón, pero siempre en condiciones de seguridad, para proteger de esta manera a este medio de transporte más débil del transporte motorizado».
La siguiente actuación será la creación de un carril bici por el puente del Ferrocarril que dé continuidad a la obra que ahora se está realizado y que lo conecte con el carril bici de la avenida de la Libertad. Asimismo, se va a encargar la redacción de una propuesta de carriles bici que se materializará en los próximos años, según añadió la edil de Movilidad Urbana, Esther Díez, «gracias a los fondos de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado de la UE».
