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Quejas por las colas en el centro de salud de Altabix

Los usuarios tienen que esperar más de una hora para realizar cualquier trámite administrativo

Quejas por las colas en el centro de salud de Altabix

Los usuarios del centro de salud de Altabix están algo más que cansados de soportar la saturación saturación que a diario -sobre todo en las horas centrales de la mañana- se registra en los mostradores de atención al público. A pesar de que el personal trabaja casi al límite de sus posibilidades, habitualmente las personas que se desplazan al centro con la intención de realizar alguna gestión administrativa se ven obligadas a permanecer durante más de una hora para pedir una cita con el médico, para solicitar turno para una analítica o para presentar algún volante.

Esta situación se viene repitiendo desde hace semanas, sin que la dirección del Hospital General haya tomado cartas en el asunto para resolver la saturación de uno de los centros con más usuarios adscritos de todo el departamentoresolver la saturación . En principio, esta situación se había paliado con la apertura de un segundo mostrador anexo a la entrada principal del centro, lo que inicialmente había permitido aligerar las esperas, aunque esta zona extra de atención al público no funciona todos los días y los usuarios se ven obligados a tener que soportar largas esperas hasta que les llega el turno.

El problema fundamental de este centro de salud es que la población dependiente de él es excesivamente elevada para unas instalaciones que se abrieron hace ahora 20 años para dar cobertura sanitaria a los residentes en el antiguo barrio de Altabix y que progresivamente ha ido ampliando su población a medida que los barrio colindantes han ido desarrollándose urbanísticamente.

La solución aportada por la Conselleria de Sanidad para paliar la situación fue la de reorganizar físicamente las instalaciones de Primaria con el fin de que el edificio albergara en el mismo recinto dos centros de salud, dotando para ello al personal necesario para que únicamente se compartieran las infraestructuras físicas pero no las dotaciones de material y de recursos humanos. Esta propuesta se puso en marcha ante la imposibilidad económica de construir un nuevo edificio sanitario debido a la crisis, pero con el compromiso de dotar al actual de los recursos humanos necesarios para su óptimo funcionamiento.

El proyecto anunciado a bombo y platillo por la Conselleria de Sanidad ha quedado en agua de borrajas y lo cierto es que el personal con el que cuenta este centro es absolutamente insuficiente para atender una de las zonas más populosas de la ciudad.

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