Las playas de Elche funcionan a pleno rendimiento con la puesta en marcha del servicio diario de socorrismo en los puestos de las playas de Arenales del sol, Arenales Sur, El Altet, Carabassí, La Marina y el Rebollo, playas que cuentan este año con banderas azules una vez más.
La vigilancia en las playas se mantendrá hasta el próximo 15 de septiembre de forma diaria y los dos siguientes fines de semana, es decir, hasta que finalice el mes de septiembre.
Como el año pasado el servicio lo ofrecerá DYA y junto a los puestos de vigilancia habrá un total de cinco embarcaciones para atender emergencias además de una ambulancia 24 horas en Arenales, Torrellano y El Altet.
Así, el servicio de socorrismo se ofrece entre las 11 y las 20 horas a diario, para lo cual se cuenta con un equipo de unas 50 personas entre coordinadores, conductores de ambulancia, patrones, sanitarios, y socorristas.
El responsable de DYA, Antonio Tarí, recordó que «el servicio se venía prestando los fines de semana desde comienzo de junio y este año, como novedad, se ofreció un servicio diario desde el día 7 de este mismo mes en las playas de Arenales del Sol y la Marina, que contaron con la presencia de una ambulancia en cada una de ellas», y señaló que «esta modificación se debió a que este año se observó una gran afluencia de personas, tanto ilicitanos como visitantes, en las playas ilicitanas debido al buen tiempo».
Antonio Tarí también dijo que «tenemos que pedir a la gente, sobre todo en la zona de la Marina, que por favor hagan caso a la bandera roja, que señala que el baño está prohibido, por lo que solicitamos que respeten la bandera y tengan un feliz verano».
Y es que en los últimos años desde el servicio de socorrismo han advertido que la playa de La Marina es el único lugar en el que se registran casos de ahogamiento. Ello es debido, según indicaron desde DYA, a que La Marina es una zona donde se producen corrientes que impiden a los bañistas salir nadando del agua.
Consejos
Para hacer frente a las corrientes desde DYA lanzaron varias recomendaciones. La primera de ellas es que una vez que la corriente arrastra al bañista hacia el interior lo mejor es dejarse llevar hasta que finalice y pueda salir nadando. Otra opción es, si se goza de la condiciones apropiadas, salir buceando hacia la orilla, ya que nadando es imposible.
No obstante, en cualquier caso desde DYA apuntaron que los bañistas que se encuentren con este problema deben de pedir ayuda a los socorristas y tratar de conservar la calma para aguantar en el agua.
