El portavoz del grupo municipal y presidente de la agrupación local del PSOE Elche, Antonio Rodes, será uno de los testigos que aportará Alejandro Soler en el juicio que se celebrará el próximo día 26 contra el exalcalde ilicitano tras la denuncia de su exmujer, según ha podido confirmar este periódico de varias fuentes socialistas. De hecho, Rodes se presentó ayer en la Ciudad de la Justicia de Elche para apoyar a Soler, junto a los concejales Blanca González y Francisco Rubio, que mostraron su respaldo y su convencimiento de que el exregidor es totalmente inocente.
La denuncia contra el exalcalde causó ayer una verdadera conmoción tanto en la agrupación local como en el propio grupo municipal socialista. Tanto es así, que fuentes del partido afirmaron que su expareja Manuela Gonzálvez se había dirigido en varias ocasiones a Antonio Rodes para que convenciera a Soler de que variara el convenio económico al que llegaron una vez formalizada su separación. Desde la agrupación también se insistía en que iba a testificar a favor del exalcalde la mujer de Ángel Franco, miembro de la Ejecutiva Provincial del PSOE, y que al parecer había coincidido recientemente con ella en una comida en la partida de La Hoya donde le transmitió su malestar contra su exmarido. También Soler contará con el testigo de una vecina que el domingo pasaba por delante del portal donde supuestamente discutía el matrimonio, según fuentes del partido.
Dependencia política
La decisión de Rodes de prestar su apoyo «incondicional» a Alejandro Soler en un asunto tan escabroso como es una denuncia por malos tratos -el PSOE es absolutamente intransigente en estos casos- pone de relieve la dependencia política que tiene el actual portavoz con el exalcalde. Y no es para menos. Pese a que ha habido cierto distanciamiento entre ambos políticos durante este mandato, en los últimos tiempos habían acercado posturas, quizá debido a la necesidad de conseguir los avales suficientes para imponerse en las primarias que se celebraran dentro de unos meses. Lo que no se esperaban desde la agrupación local es que por el camino estallase este escándalo que pone contra las cuerdas al grupo municipal y el propio futuro político de Rodes. Una condena contra Soler podría desencadenar un cisma total en la agrupación local que, de momento, controla el portavoz municipal, que pretende ser el próximo candidato a la Alcaldía.
Pero los dolores de cabeza para los socialistas ilicitanos no acaban sólo aquí. El concejal Emilio Martínez está pendiente de que le acepte la jueza del juzgado de instrucción número 5 de Elche un recurso para evitar ir a juicio oral por el caso Urbielx en el que se le acusa de un presunto delito de tráfico de influencias y negociación prohibida para funcionarios cuando era concejal de Urbanismo. Un arquitecto ilicitano acusó, entre otros, al propio Martínez y al exalcalde socialista Diego Maciá de influir en la compra de una parcela en las inmediaciones del actual centro comercial de El Corte Inglés mucho tiempo antes de la construcción de ese complejo. El edil ha afirmado que presentará su dimisión si no prospera el recurso.
La cuestión es que al PSOE se le complica el futuro y su anhelo de volver a gobernar en la tercera ciudad de la Comunidad Valenciana.
