El Hospital del Vinalopó de Elche, que atiende también a pacientes de Crevillent y Aspe y es un centro público aunque de gestión privada (a cargo de Ribera Salud y Asisa), trasladó a lo largo del año 2012 a un total de 64 pacientes desde sus instalaciones hasta las del hospital privado IMED, situado en el parque empresarial de Torrellano, en lugar de derivarles a su hospital público de referencia en las especialidades que no tiene, que es el Hospital General de Elche. El dato lo ha proporcionado el conseller de Sanidad a raíz de una pregunta del PSPV-PSOE en las Cortes Valencianas, y la explicación por parte del Hospital del Vinalopó a preguntas de este diario sobre los motivos que han llevado a enviar a los pacientes a un centro privado en lugar de uno público es simplemente «Vinalopó Salud únicamente piensa en ofrecer el mejor servicio a los ciudadanos y en cubrir las necesidades asistenciales de la población que tiene asignada en virtud del contrato que tiene firmado con la Generalitat Valenciana».

No se ha explicado, en este sentido, si el Hospital IMED dispone de algún servicio o maquinaria que Elche no tenga en su cartera sanitaria pública, ni si los 64 casos coinciden con momentos de saturación en el Hospital General. Si la explicación fuera alguna de estas, quizás correspondería solicitar a la Conselleria de Sanidad que refuerce o aumente los servicios que presta en Elche, habida cuenta de que para atender a los ciudadanos hay que recurrir a clínicas privadas.

Por su parte, la Conselleria de Sanidad asegura a la luz de este dato que «efectivamente y ante la derivación habitual de pacientes de la especialidad de Neurocirugía a clínicas privadas, desde el primer trimestre de 2013 existe una instrucción de la Dirección General de Asistencia sanitaria a la dirección del Hospital del Vinalopó que establece que se debe evitar la derivación de pacientes de Neurocirugía y Salud Mental a clínicas privadas, ya que debe primar la derivación de pacientes a centros de la red de recursos propios de la Conselleria, en este caso el Hospital General de Elche».

En el caso concreto de esta especialidad, cuando se definió la cartera de servicios del Hospital del Vinalopó no se creó Neurocirugía porque ya existía en el Hospital General de Elche y en el Hospital General de Alicante, por lo que se establecía que sería en estos centros en los que serían atendidos los pacientes del Departamento del Vinalopó que lo precisaran.

Coste

La diputada socialista Modesta Salazar preguntó también al conseller por el coste que estos traslados suponen, a qué especialidades o grupos de diagnósticos corresponden, y cuántos ha efectuado el Hospital General. La respuesta es escueta y parcial: Obvia responder a qué especialidades corresponden los traslados, y señala que «los ciudadanos adscritos al Departamento de Salud del Vinalopó tienen cubierta la asistencia de las especialidades de Neurocirugía y Neurorradiología sin que ello represente ningún coste añadido a la Conselleria de Sanidad» (de lo que se desprende que ese coste está incluido en lo que la Generalitat paga periódicamente a Ribera Salud y Asisa para que atiendan a una población de 150.000 personas).

Por otro lado, el Hospital General ha derivado en 2012 al IMED a tres pacientes, lo que supuso «una facturación» a la Conselleria de 31.600 euros. Este hospital no dispone de Neurorradiología (que estaba en Alicante y cerró, según Modesta Salazar) con lo que ahora hay que recurrir a clínicas privadas.