La Generalitat no apoyará de una forma decidida el proyecto para la creación de una zona franca que impulsa la Diputación mientras no exista un acuerdo de consenso con los ayuntamientos de Elche y Alicante sobre su puesta en marcha. Así de contundente se ha mostrado hoy el conseller de Economía, Rafael Climent, al ser preguntado por esta iniciativa, tras el encuentro que ha mantenido con los miembros del Instituto de Estudios Económicos de la provincia (Ineca), en el que también ha participado el titular autonómico de Hacienda, Vicent Soler.
En este sentido, Climent se ha mostrado visiblemente molesto por el hecho de que la Diputación dejara una silla vacía con su nombre durante el acto en que el pasado viernes se presentó el estudiode la consultora PwC sobre este proyecto. Una estrategia del ente provincial para evidenciar la falta de implicación del Consell en su puesta en marcha. "Me parece una falta de tacto, ya avisamos de que no podíamos acudir, no había motivo para hacer algo así. Desde el respeto las cosas funcionan mejor", ha asegurado el responsable de Economía, que ha recordado que ya explicó las condiciones que había puesto el Ejecutivo autonómico para respaldar esta iniciativa.
"Dijimos que queríamos que fuera un proyecto que naciera de abajo hacia arriba y que lo primero era que existiera un acuerdo con los dos ayuntamientos implicados y también con el empresariado", ha explicado el conseller. "No tengo eso sobre la mesa en este momento", ha insistido delante del presidente de Ineca, Perfecto Palacio, una de las instituciones más implicadas en el impulso a la zona franca, que realizó el estudio inicial sobre las posibles repercusiones de su puesta en marcha.
En la misma línea, el conseller de Hacienda, Vicent Soler, expresó su sorpresa por el hecho de que sea la Diputación quien haya puesto esta iniciativa ya que "no tiene ninguna competencia en la materia" y advirtió de la necesidad de "estudiar muy a fondo las ventajas e inconvenientes" antes de ponerlo en marcha. "Una zona franca es un proyecto muy poliédrico, no se resuelve en un 'tuit'", apuntó Soler.
Monitorizar al Consell
Estas declaraciones se han producido tras el encuentro que ambos responsables han mantenido con los socios de Ineca, en la que su presidente ha insistido en denunciar la infrafinanciación y la falta de inversiones que sufre la provincia por parte de la Generalitat. Una denuncia a la que Vicent Soler ha respondido señalando que "el Consell invierte donde hay problemas", con independencia de la provincia donde se produzcan, y ha puesto en caso de la inversión en infraestructuras ferroviarias, que este año se concentra en un 75% en Alicante por la necesidad de mejorar la seguridad de la línea del Tram entre Benidorm y Dénia.
También ha recordado que las inversiones en infraestructuras suponen un parte muy pequeña del presupuesto de la Generalitat -alrededor de 800 millones de un total de 17.000- y que el grueso del gasto se realiza para atender servicios básicos como sanidad o educación. En este sentido, instó a los empresarios a comprobar "si las listas de espera en los hospitales o la ratio de alumnos" es mejor o peor en la demarcación. En cualquier caso, los consellers se han comprometido a mantener encuentros periódicos con Ineca para informarles del grado de ejecución de los presupuestos en cada momento y que puedan "monitorizar" que no se produce ningún tipo de discriminación hacia la provincia.
Ineca también ha criticado el Impuesto de Sucesiones, que el Consell subió el pasado 1 de enero, y que considera "injusto". Una crítica que ha caído en saco roto porque el titular de Hacienda le ha recordado que la Comunidad recibe del Estado menos recursos de los que le corresponden por habitante, por lo que no puede renunciar a los ingresos que aporta este tributo.
