La Diputación de Alicante ha empezado a trabajar en un plan para promover zonas empresariales en aquellos municipios de la provincia que aún no tienen suelo industrial y, en particular, en aquellas localidades más pequeñas. El objetivo, según mantienen desde la institución que preside César Sánchez, es combatir el despoblamiento. De hecho, las cifras que manejan desde la Corporación provincial apuntan a que sólo el año pasado se perdieron 24.000 habitantes en 88 municipios del interior, y de lo que se trata es de frenar esta tendencia. «Si queremos evitar el despoblamiento, lo lógico sería que se dotase de suelo industrial a estas localidades, ya que eso permitiría atraer empresas y crear empleo, lo que haría que la gente se quedara en esos municipios», mantienen desde el Palacio de la avenida de la Estación.
Como primer paso, la Diputación ha tomado como base las estadísticas del Consell, que detallan que en estos momentos hay 64 municipios -precisamente los que menos habitantes tienen- que no disponen de suelo empresarial. De hecho, dentro de la ronda de contactos que está manteniendo César Sánchez con los alcaldes de la provincia, se está tratando de conocer de primera mano cuáles son las necesidades en ese sentido, para, a partir de ahí, empezar a concretar el plan. Una vez conocido el número de localidades que estarían interesadas en acogerse a este proyecto, se dará un paso más en esta línea. Por el momento, han sido varios los regidores que han mostrado su interés por una iniciativa como ésta.
Sea como sea, desde la Corporación provincial mantienen que la idea es promover pequeñas parcelas o áreas empresariales, siempre y cuando la normativa urbanística y ambiental lo permitan, y siempre trabajando codo a codo con los ayuntamientos para dar respuesta a sus necesidades, alegan desde la Diputación. Ahora bien, en ningún caso se plantearán megaproyectos, dejan claro.
El plan, paralelamente, contempla la posibilidad de establecer vías de colaboración con aquellos municipios que ya disponen de suelo empresarial, pero que requieren de actuaciones de modernización, en aspectos como el alcantarillado, la iluminación, la fibra óptica, la señalización o la renovación de asfaltado, por ejemplo, o desarrollar áreas específicas para poder trasladar allí a aquellas compañías que, en la actualidad, se encuentran en los cascos urbanos.
En principio, esas líneas de colaboración se podrían concretar, tal y como señalan desde la institución, en asesoramiento en las labores de tramitación o en el diseño de las áreas, pero también en la búsqueda de financiación o de ayudas, procedentes, sin ir más lejos, de la Unión Europea. Ahora bien, desde la Diputación tampoco descartan financiar parte de esos proyectos.
Por ahora, desde el Palacio Provincial alertan que el plan está en una fase muy incipiente, aunque admiten que lo que buscan es que antes de que acabe este mandato pueda estar totalmente implantado.
