Benidorm está despidiendo a los turistas que han decidido apostar por la ciudad para sus vacaciones con buenas temperaturas. Los termómetros, que rozan los 20 grados, han permitido que residentes y visitantes disfruten de un día primaveral, para muchos el último no lectivo de esta Semana Santa. Las tres playas de la ciudad han dejado estampas propias del estío, al igual que los bares y restaurantes de la ciudad.

Al igual que hace unos días, la AP-7 volverá a registrar colas para despedir a los turistas, que apuran sus últimas horas en busca de sol y playa. Las vacaciones de Semana Santa se prolongarán un día más para los residentes en Baleares, Cataluña, Comunidad Valenciana, Navarra y País Vasco. Los visitantes vascos, son precisamente uno de los mercados más importantes para Benidorm y han permanecido fieles a la ciudad un año más.

Desde Hosbec, ya definieron hace unos días este periodo como "una de las mejores semanas santas de los últimos años", con cifras que rondan el lleno en alojamientos como hoteles y campings. El buen tiempo, en líneas generales (llovió durante unos minutos el viernes), está acompañando, por lo que los balances de ocupación se presentan realmente positivos para la ciudad.