Cuando nacieron los coches eléctricos, la previsión era que en un espacio corto de tiempo llenarían las calles. Sin embargo, en la Marina Baixa, el número de este tipo de vehículos ha crecido muy poco en los últimos años contando la comarca con apenas 81 ejemplares registrados el pasado año. De todos ellos, Benidorm es la que más tiene con el 42%, seguida de Relleu, una pequeña localidad del interior, con el 18,5% del total.
Los coches eléctricos son aquellos que en vez de funcionar con gasolina o el diesel lo hacen con electricidad. En comparación con los primeros, no realizan emisiones a la atmósfera de CO2, además de realizar una menor contaminación acústica. Sin embargo esto no parece haber llamado la atención lo suficiente a los usuarios ni a las administraciones.
En el primer caso se refleja en sólo un ligero aumento de matriculaciones en los últimos años. En la Marina Baixa, en 2010 había apenas 28 vehículos de este tipo entre turismos, motos, ciclomotores o furgonetas. Cinco años más tarde, en 2015, hubo un aumento hasta los 73 matriculados que pasaron a 81 el pasado año. La mayor parte de ellos están inscritos en Benidorm que en 2016 contaba con 34 vehículos de este tipo, el doble que seis años antes.
Tras la capital turística, la localidad con más transporte eléctrico es Relleu, un municipio de poco más de 1.200 habitantes que cuenta con el 18,5% del total de la comarca y que en apenas cinco años ha pasado de no contar con ninguna de estas matriculaciones a tener 15 inscritos. La razón es la misma que ocurre con los vehículos con combustible: el impuesto es más barato que en cualquier otro municipio.
La Vila, Altea, Finestrat son las siguientes con ocho vehículos de este tipo seguidas de L'Alfàs con cuatro, La Nucía con tres y Polop con una motocicleta. Y poco más.La esperada fiebre por este tipo de vehículos parece que está en «stand by».
Sin apenas puntos de carga
Otra de las razones para que este tipo de vehículos no llamen a los compradores es dónde cargarlos. En Benidorm, existe sólo un punto en la vía pública: en la avenida de L'Aigüera. El Ayuntamiento proyectó alguno más pero, por ahora, sólo han quedado en el papel. Sí existen en el municipio puntos ubicados en lugares privados para realizar cargas como en un aparcamiento o un negocio de alquiler de coches.
En el resto de la comarca, la situación es prácticamente la misma con algún punto de recarga en lugares como el Club Náutico de La Vila o los tres que existen en Altea. En Relleu, con tantos coches matriculados, no existe ninguno.
