Por muy paradójico que parezca, el país más hermético del mundo y uno de los regímenes con menos libertades, Corea del Norte, quiere copiar el modelo turístico de Benidorm, ciudad abierta y tolerante por antonomasia. Una delegación oficial de veinte arquitectos, con el embajador Kim Hyok Chol a la cabeza, visitó ayer Benidorm para observar todos los detalles urbanísticos de la ciudad, desde los más simples como los pomos de las puertas o los ascensores, hasta los más complejos, como los edificios, los hoteles o la red de alcantarillado.
Tras un recorrido en las últimas semanas por Grecia, Francia e Italia, los técnicos, acompañados también por el director general de Turismo del país, han visitado en los últimos días Barcelona, Oropesa, Salou y ahora Benidorm para acabar su recorrido en Portugal. En todas las ciudades la visita ha durado unas horas mientras que en Benidorm han pasado un día y medio ante el interés que han generado los rascacielos y cómo se ha creado una ciudad densamente poblada en vertical, tal como explicó el presidente de la Fundación Frax, Matías Pérez Such.
Acompañados en todo momento por el alcalde de Benidorm, Toni Pérez, la delegación acudió en primer lugar a la inauguración de la exposición del artista Óscar Tusquets, «Gran Benidorm», en el Museo Boca del Calvari, donde destacaron que es la ciudad «más imponente y espectacular», la que tiene los «edificios más altos» y la que disfruta de «más vida en la calle». La visita al museo, ubicado en pleno centro de la ciudad, generó una gran expectación entre los vecinos y turistas que paseaban por las calles peatonales.
Tras prestar atención a las imágenes y vídeos de la exposición, acudieron al cámpin Villasol, visita que les llamó la atención, según afirmaron, por la intención que tienen de comenzar su proyecto turístico paulatinamente, iniciándose en el negocio con este tipo de alojamientos y con una apuesta menos arriesgada que las grandes construcciones de hoteles. Allí fueron atendidos por la directora Mari Carmen Sellés y por el personal del negocio.
Al mediodía recorrieron las instalaciones de Terra Mítica, comieron en uno de sus restaurantes y estuvieron muy interesados en las dimensiones, capacidad e inversión del parque. Otro de sus objetivos es construir unas instalaciones similares en Corea del Norte.
El viaje cuenta con el apoyo y el manto protector de la Organización Mundial del Turismo (OMT) de Naciones Unidas, organismo encargado de la promoción de un turismo responsable, sostenible y accesible que contribuya al crecimiento económico. La OMT ofrece apoyo al sector para expandir sus conocimientos y políticas relacionadas en este ámbito.
Abrir puertas al exterior
El alcalde de Benidorm, quien recibió un cuadro como regalo del grupo de asiáticos, se mostró encantado de recibirlos y destacó la importancia del turismo para abrir puertas de cara al exterior, añadiendo que «es una pena que tengan que venir de fuera para decirnos que esto es un paraíso y la suerte que tenemos de vivir aquí».
Por su parte, Pérez Such, aseguró que esta visita «es un elemento esperanzador para el futuro del país» porque «el turismo tiende puertas y rompe fronteras. Hoy -por ayer- Benidorm ha trabajado por la paz en el mundo», señaló. Para el experto en Turismo, «hoy se ha reconocido que la ciudad tiene un modelo sostenible y rentable». El hecho de que Corea del Norte se interese por este sector «puede resultar muy positivo para el país y para su desarrollo. Ojalá Corea del Norte camine por ese sendero», apuntó.
