Sobre la bocina y sin tiempo de descuento, pese a tratarse de una infraestructura de espectacular calado. La multinacional francesa Unibail Rodamco iniciará a contrarreloj en los próximos días las obras del primer centro comercial de Benidorm, antes de que otra demora pueda dar al traste con toda la tramitación que se ha sucedido hasta la fecha. Para ello, está a la espera de que el próximo martes el gobierno local de la ciudad, del Partido Popular, dé luz verde a la licencia para empezar con el movimiento de tierras en la parcela de 71.091 metros cuadrados sobre la que se levantará esta gran superficie, el paso previo comenzar con la cimentación, que estaría prevista para después del verano.
El tiempo apremia en su contra. Porque la promotora del centro comercial está expuesta a que, en menos de un mes, pueda caducar la licencia de actividad que la Generalitat Valenciana le concedió en diciembre de 2015. La misma estaba condicionada a que las obras se iniciasen en un plazo de 18 meses, con una posibilidad justificada de prórroga de otros seis. De modo que, a partir del 14 de junio, correría el riesgo de que el Consell pudiera dar por caducado el expediente y obligar a tramitarlo de nuevo. Y eso es lo que nadie quiere.
Ni la multinacional, que lleva casi una década invirtiendo dinero y empeño en sacar adelante el proyecto, ni tampoco el Ayuntamiento, sobre todo por los números que envuelven al mismo: una inversión cercana a los 210 millones de euros; 58.000 metros cuadrados de zona comercial, con 134 establecimientos previstos, entre ellos una veintena de restaurantes y 3.000 plazas de aparcamiento; y la previsión de crear alrededor de 2.000 empleos directos e indirectos.
Luz verde de los técnicos
Unibail Rodamco presentó la solicitud de licencia ante el Ayuntamiento el pasado 17 de marzo. Desde entonces, se han sucedido hasta cuatro informes técnicos de las áreas de Topografía, Ingeniería y Arquitectura municipales, en las que se solicitó a la empresa la subsanación de distintas deficiencias en el proyecto, que ya están del todo resueltas. Así se detalla en un quinto y definitivo informe, éste del departamento jurídico, que concluye en emitir su dictamen favorable a conceder la licencia, al considerar que se habría dado cumplimiento a todos los trámites requeridos.
Entre ellos, los informes favorables de la urbanizadora del sector industrial PP 3/1, la mercantil Terra Village, participada al 50% por el constructor alicantino Enrique Ortiz; la liquidación de tasas por licencia urbanística por parte de Unibail Rodamco o el depósito de una fianza de 210.886.83 euros, por la posible afección de estas obras a los viales públicos o a otros servicios e infraestructuras de este plan parcial.
«Pistoletazo de salida»
La edil de Urbanismo, Lourdes Caselles, afirmó ayer que el inicio de los movimientos de tierra supone «el pistoletazo de salida definitivo para el desarrollo de este sector urbanístico». El siguiente paso será la presentación por parte de la empresa del proyecto básico y el de ejecución, que el departamento de Urbanismo confía en que se presente en pocas fechas. También resta por desarrollar la rotonda de acceso desde la zona de Levante y el conocido como «vial discotecas», obras que podrían ir en paralelo con las del centro comercial.
