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Benidorm

Una guerra tapada por el bikini

Durante el boom turístico se destruyeron los búnkeres de la Guerra Civil española, salvo dos

Una guerra tapada por el bikini

Cuando los republicanos de Benidorm se defendían desde sus refugios de los ataques del bando franquista, nada hacía presagiar que a partir del 1952 las mujeres se pasearían en bikini por la zona. Ese boom turístico que llevó aparejada la construcción y renovación de gran parte de la localidad, provocó que los vestigios de la Guerra Civil españolavestigios Guerra Civil española (1936-39) desaparecieran. La ciudad costera poseía seis búnkeres repartidos por sus playasbúnkeres playas, según confirma el catedrático Francisco Amillo, quien sospecha que la imagen que ofrecían habría supuesto la eliminación de los mismos.

En la actualidad, sólo se conserva en buen estado el del Rincón de Loix. Eso sí, se ha convertido en una especie de basurero, con el interior lleno de latas, botellas y bolsas. Y es que a día de hoy no tiene ninguna protección. En verano, cuando la playa de Levante se llena hasta la bandera, los turistas se tumban al sol a dos pasos del refugio. Como consecuencia, las rendijas aún abiertas del búnker sirven para tirar los restos de un día de playa.

Los otros cinco refugios, que en realidad eran nidos de ametralladora, según Amillo, estaban situados en la cala del Mal Pas, en el Parque de Elche, en Poniente (entre la avenida Armada Española y Vicente Llorca Alós), frente al Hotel Cimbel en Levante y en la plaza del Torrejó. De éste último aún se conserva parte de la estructura de abajo. No obstante, según comentaron fuentes de la concejalía de Patrimonio Histórico y Cultural, cuando sube la marea, ésta queda sepultada bajo el agua y hace imposible que se vea. Como consecuencia, muchos de los que cada día frecuentan esa zona no sabrán que las piedras por las que andan formaban parte de un punto clave para defender a la localidad.

Bien protegido en un futuro

Las mismas fuentes del Consistorio comentaron que en la actualidad están elaborando el catálogo de todos los elementos que poseen un valor histórico y cultural. En estos momentos están recopilando la información de unos 140 elementos de este tipo, que aumentará con el tiempo. Entre ellos, están los dos búnkeres de los que aún se conservan restos.

Más tarde, en caso de que el pleno aprobara la iniciativa, sacarían a licitación la realización de un fichero por parte de un equipo de expertos externos. De esta manera, cada uno de los elementos estarían clasificados según lo que estimaran los órganos competentes. Posteriormente, tal y como indicaron fuentes del departamento de Patrimonio, habría que dejar libre cada uno de ellos para asegurar su conservación.

Esto pondría en peligro la continuidad de una parte de la terraza del histórico Hotel Nadal, porque, según indicaron las mismas fuentes, tiene parte de la misma sobre los búnkeres del Rincón de Loix. Hecho que también sirvió en un momento para que estos refugios hoy en día sigan en pie.

Republicano hasta el último día

Según explica Francisco Amillo, Benidorm formó parte del bando republicano hasta que a finales de marzo fue ocupada por los franquistas. El día 30 ya tenía nuevo ayuntamiento constituido por los vencedores. El catedrático apunta a que durante la contienda, el mayor peligro al que se enfrentaba la ciudad venía por el aire. Es más, detalla que la aviación de la Italia fascista poseía informes que destacaban la desprotección que tenía la población. El municipio fue objetivo de éstos, por ejemplo, el 10 de agosto de 1938, cuando cayeron seis bombas en la playa.

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