El Ayuntamiento de Benidorm se suma a la moda internacional de utilizar los drones para todo tipo de actividades. La concejalía de Seguridad benidormense, al igual que en Torrevieja, quiere usar estos aparatos para mejorar y modernizar sus labores. Sobre todo, en lo que se refiere al control del mar, de las emergencias y del medioambiente.
El concejal de esta área, Lorenzo Martínez, explicó que entre los trabajos que se le asignarían a estas máquinas voladoras se encuentra el control del estado de los barrancos de cara a las riadas, la vigilancia de los escaladores que realizan psicobloc en el parque de Sierra Helada o la entrada de plásticos en la playa a través de corrientes marinas. «Es un problema con el que lidia todos los veranos la concesionaria de playas. Con un dron podríamos tener controladas esas corrientes en alta mar y avisar a los técnicos para saber por dónde van a llegar todos esos residuos, con el fin de recogerlos», argumentó. En las labores de salvamento, según el edil de Seguridad, también colaborarían. Sobre todo, a la hora de detectar el lugar donde se encuentra una persona con riesgo de ahogarse y que se ha alejado considerablemente de la orilla. Esta función podrían ejecutarla mediante unos sensores térmicos con los que cuenta el modelo de dron que quiere adquirir el Consistorio.
Lo que tiene claro este Ayuntamiento es que estos aparatos, como se pretende hacer en Torrevieja, no sustituirán la labor de los socorristas. «Entre otras cosas, porque cuentan con una serie de limitaciones legales. Existe una normativa muy estricta en cuanto al espacio que pueden sobrevolar. En nuestro país, no se les permite pasar por encima del casco urbano ni a más de 120 metros de altura, salvo en casos de emergencia. Son aspectos que tenemos que estudiar muy bien antes de aventurarnos en introducir estos aparatos al área de Seguridad», recalcó Lorenzo Martínez, a la vez que apuntilló que, de momento, la intención es comprar uno para las primeras pruebas.
