Dicho y hecho. El alcalde de Benidorm no ha tardado ni 48 horas en atender una nueva exigencia de sus socios de gobierno y ayer, otra vez vía decreto, resolvió el cese del servicio de explotación de hamacas y sombrillas en las calas de L'Almadrava y el Ti Ximo. El documento pone fin a la autorización provisional concedida hace tan sólo una semana a una particular para gestionar el alquiler de mobiliario playero en ambas calas hasta final de temporada y, además, ordena retirar los enseres y objetos instalados, «dejando expedita y en perfecto estado la zona ocupada».
En segundo lugar, en este mismo decreto, resuelve que, una vez realizados «todos los trámites procedimentales oportunos», se incoe un nuevo procedimiento de licitación para adjudicar este servicio mediante la fórmula de un concurso público, como reclamaron sus socios de gobierno liberales.
El concejal de Contratación, Miguel Llorca (CDL), exigió el martes al alcalde la revocación inmediata del decreto para autorizar la explotación de este servicio, firmado el día 18 por el primer edil, y, según Llorca, «a espaldas» de los liberales y «apropiándose de sus competencias». Y ello, a pesar de que fue el propio Llorca quien en un primer momento inició el expediente para adjudicar el servicio mediante el negociado sin publicidad.
Fuentes del PSOE local destacaron ayer que, con este nuevo decreto, dan definitivamente por zanjada la crisis abierta con sus socios de gobierno por este asunto.
