Una sentencia obliga al Ayuntamiento de Santa Pola, como responsable patrimonial, a indemnizar con 15.500 euros a la maestra que resultó herida tras el derrumbe del colegio Hispanidad en 2013 por los daños sufridos con la caída del forjado del centro.
La resolución, recibida recientemente, pasó por junta de gobierno y dicta que el Consistorio deberá indemnizar a la docente por los daños sufridos en aquel momento. La solicitante formuló una reclamación patrimonial tras el accidente en el colegio Hispanidad con el derrumbe del aula en 2013. En este caso, se estima parcialmente el recurso administrativo interpuesto en el juzgado frente al Ayuntamiento de Santa Pola. La solicitante también denunció al Consell por los mismos motivos, pero la sentencia declara la ausencia de responsabilidad patrimonial por parte de la Administración autonómica.
Por este motivo, la resolución señala al Consistorio de la villa marinera responsable de los hechos y ordena indemnizar a la demandante con 15.500 euros por su responsabilidad patrimonial.
La Corporación santapolera ya dio cuenta de la sentencia y en estos momentos se ha trasladado a la compañía de seguros que se encarga de las reclamaciones patrimoniales del Ayuntamiento para que realice las gestiones necesarias para resolver y cumplir con esa sentencia.
La docente fue una de las diez personas heridas en el derrumbe del colegio Hispanidad en enero de 2013, en el momento en el que el suelo de su aula se vino abajo. Nueve alumnos y sus pupitres cayeron en una fosa, de más de metro y medio de profundidad y 35 metros cuadrados llena de sillas, mesas y escombros. Entre las personas accidentadas, cuatro menores y la docente fueron trasladados al Hospital General de Elche, para recibir atención médica por los daños causados. La profesora, además, presentaba un gran estado de nerviosismo y ansiedad por el suceso en el aula de cuarto de Primaria del colegio santapolero que cedió en la planta baja y hundió su forjado.
Finalmente, tras interponer la denuncia, la afectada recibe esta sentencia favorable en la que el Ayuntamiento cubrirá con esta suma de dinero los perjuicios ocasionados después del derrumbe que acabó, finalmente, con la demolición del centro de Primaria en la villa marinera.
Informes
Después del incidente, se conoció uno de los informes de la inspección técnica del edificio que se realizó en 2010 y que concluía que «el edificio presenta peligro inminente y requiere de medidas de seguridad en 20 días». El diagnóstico que se realizó entonces en el centro escolar alertaba del mal estado del inmueble y obtuvo resultados desfavorables en el estado de la estructura, las fachadas interiores y exteriores, las cubiertas y las azoteas, y las redes generales de fontanería y saneamiento. El Ejecutivo local en aquel momento, del Partido Popular, insistió en que el Ayuntamiento de Santa Pola subsanó todas las deficiencias en el colegio Hispanidad antes de que se produjera el accidente y que solucionaron con celeridad las problemas que apuntaban a un peligro inminente.
Ahora, el juzgado de Instrucción número 3 de Elche investiga a la entonces edil de Urbanismo, Lola Gadea, a la arquitecta municipal y a otra arquitecta externa que hizo los estudios técnicos. A la edil del PP y a la técnica municipal se les acusa de un delito contra los trabajadores y otro de lesiones por imprudencia grave y a la profesional externa se le investiga por falsedad documental.
