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Alicante no logra rebajar sus niveles de paro pese a la mejora económica

La provincia ha perdido 12.500 ocupados en el primer trimestre y la tasa de desempleo sube al 18,30%, tras registrar mil parados más

Imagen de trabajadores, en un edificio en construcción. jose navarro

La recuperación de la economía que vienen reflejando distintos indicadores en los últimos meses no se ha traducido en una mejora del empleo en la provincia, que ha visto cómo aumentaba la tasa de paro hasta el 18,30% en el primer trimestre del año, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) publicados ayer.

La compraventa de viviendas creció un 12,8% en Alicante en febrero y las matriculaciones de turismos aumentaron un 6,7% el pasado año. Y, aunque en marzo la venta de coches sufrió un retroceso, las operaciones de los de segunda mano se incrementaron un 2%, según datos sectoriales. A la evolución positiva de ambos indicadores de consumo, se suman las previsiones sobre la evolución del Producto Interior Bruto (PIB), que apuntan a una variación al alza del 0,8%, según distintos organismos, tras registrar un aumento del 3,1% en 2017. Además, según las previsiones del Colegio de Economistas, la mejoría económica, que suele traducirse en un aumento de los ingresos para muchas familias, hará que este año a casi 200.000 alicantinos (15.000 más que hace un año) les salga a pagar en sus declaraciones de la Renta.

Sin embargo, el mercado laboral alicantino parece que no acaba de recoger los frutos de esa reactivación. Muy al contrario, arroja balances negativos. Al cierre del primer trimestre del año, la provincia contaba con 729.900 ocupados, que representan 12.500 menos que a finales de 2017. Y sumaba mil parados más. De los 162.500 alicantinos sin empleo que había en el cuarto trimestre del pasado año se ha pasado a los 163.500 actuales. Y, aunque a nivel estatal la tendencia ha sido similar, la tasa de paro provincial (18,30%) supera a la media estatal del 16,74% y a la autonómica, del 17,13%. Más elevado aún es el nivel de desempleo juvenil en Alicante, que se sitúa en el 34,4%, pese a haber bajado respecto al 40,3% que representaba en el cuarto trimestre del pasado año.

Especialmente, significativo ha sido el descenso de la población ocupada, teniendo en cuenta, además, que en marzo se celebró la Semana Santa, un periodo que, tradicionalmente, impulsa el empleo en el sector turístico (hoteles, restauración).

Los servicios y la construcción

La destrucción de puestos de trabajo está directamente relacionada con los descensos registrados en actividades estratégicas de la economía provincial como el sector servicios, que tiene ahora 8.200 ocupados menos, o de la construcción, que ha perdido 3.100 en el primer trimestre. Una evolución negativa a la que se suma la agricultura, que cuenta ahora con mil empleados menos que tres meses antes. Sin embargo, la industria mantiene sus niveles, con 132.800 personas trabajando. Los sindicatos advierten de que la fuerte pérdida de empleo trimestral no es el único síntoma de la debilidad del mercado de trabajo provincial, también señalan el impacto que se deriva de una «elevada precariedad laboral», denuncian UGT y CC OO.

Los trabajos por horas

«Los contratos a tiempo parcial (por horas) superan ya el 41% de los que se firman y, en el caso de los indefinidos, se sitúan alrededor del 49%», subrayaba José María Ruiz Olmos, responsable de Empleo de CC OO en l'Alacantí-Les Marines. Por su parte, Yaissel Sánchez, secretaria territorial de UGT en la misma comarca, volvía a insistir en «cómo se trocea el empleo» en la provincia con la contratación por horas. Un «subempleo» a tiempo parcial que, además, «en muchos casos se convierte en una jornada a tiempo completo por imposición de las empresas, con la consiguiente falta de cotización de esas horas que, además, en otros muchos casos no son compensadas».

Y otro dato sobre el que alerta CC OO es el aumento de la población inactiva, en más de 11.400 personas en tres meses, un colectivo en el que la EPA incluye a parados que no se encuentran en «búsqueda activa de empleo en ese momento, según la definición de la Encuesta, pero que sí están disponibles para trabajar», añade Ruiz Olmos.

A nivel socio-económico, las consecuencias más inmediatas del aumento del paro y del descenso de la ocupación se sufren en muchos hogares. De hecho, en Alicante hay ahora 3.000 familias más que hace tres meses donde todos sus miembros están sin trabajo. El total de viviendas que se encuentran en esta situación se ha elevado en el primer trimestre del año hasta las 62.700, según los mismos datos de la EPA. Pero, igualmente, la pérdida de empleo en este periodo ha tenido su traducción en que 5.700 hogares más que a finales del pasado año tienen que salir adelante sin perceptores de ingresos. El total de familias que sobreviven en estas circunstancias alcanza el número de 46.000 en Alicante.

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