El Hospital General de Alicante ha evitado la muerte de casi 500 personas a lo largo de un año, según los datos que maneja el Servicio de Cardiología del centro. En concreto, entre enero y noviembre de 2015 se ha logrado atender a tiempo a 485 personas que habían sufrido un infarto agudo de miocardio y que habrían fallecido de no haber recibido la asistencia urgente que requerían. Estos pacientes no sólo procedían del área adscrita al Hospital General alicantino, sino de toda la provincia, al ser este centro la referencia para las patologías coronarias más severas, aunque también se atiendan casos de este tipo tanto en Elche como en Sant Joan d'Alacant.
El jefe del Servicio de Cardiología del General de Alicante, Francisco Sogorb, incide en que cada vez es mayor la atención a pacientes coronarios que requieren una atención urgente, pero que «las redes creadas» en la provincia, tanto por la asistencia en Alicante, Elche y Sant Joan como por la rapidez en los desplazamientos necesarios, permiten lograr un éxito muy importante en estas intervenciones. Además de los citados casos de infarto, entre enero y noviembre se ha atendido a tiempo a otras 1.158 personas que habían sufrido una angina de pecho. De esta forma, hasta el momento se ha evitado que 1.643 personas fallecieran o sus afecciones tuvieran consecuencias más graves.
Esas cifras probablemente se reflejarán el año próximo en los datos de altas hospitalarias del Instituto Nacional de Estadística (INE), que hace poco publicó los correspondientes a 2014. El año pasado se atendió con éxito por cardiopatías isquémicas en la provincia a 5.782 personas, 2.426 de las cuales habían padecido un infarto agudo de miocardio y 682 una angina de pecho. Estos datos se encuentran bastante estables en los últimos años, lo que refleja de alguna manera la actividad de los servicios de Cardiología de los hospitales. En este sentido, Sogorb destaca que la red de asistencia en la provincia «está muy entrenada», y que el protocolo que se sigue «se implantó cuatro años antes de que se institucionalizara en el conjunto de la Comunidad Valenciana». Por ello, no le sorprende que los números sean elevados, ni que puedan crecer aún más en los próximos años, al conseguir que más personas superen sus dolencias coronarias.
Las enfermedades del corazón siguen teniendo bastante más incidencia en los hombres, aunque las cifras muestran un lento pero progresivo aumento de los casos en la mujer. El jefe de Cardiología del Hospital General lo corrobora, achacándolo tanto a que hasta hace relativamente poco los hábitos poco saludables eran más habituales en hombres como a condiciones fisiológicas: la actividad hormonal protege en cierta manera a la mujer, pero más bien «retrasa» estas enfermedades hasta la llegada de la menopausia. En cambio, a partir de entonces «se incorpora» a ellas, «y en condiciones menos favorables». De ahí, explica, que se incremente la incidencia de estas patologías en féminas de mayor edad. La longevidad es, además, determinante en este aspecto: al mismo tiempo que se vive más -sobre todo en el caso de la mujer- es más fácil que aparezcan estas dolencias, como las derivadas del estrechamiento de la arteria coronaria.
