El Ayuntamiento de Alicante prevé contratar un crédito de 45 millones de euros con el que amortizar el primero de los préstamo que solicitó en 2012 para pagar las facturas pendientes con los proveedores. La operación, que básicamente supone sustituir un préstamo por otro, tiene como objetivo que las entidades bancarias que aspiren a la nueva contratación compitan para ofertar un tipo de interés más bajo que en el primero de los préstamos. De esta forma, la entidad local reduciría el montante que cada año destina a pagar intereses bancarios (en torno a 6,5 millones anuales). Una medida que permitiría liberar dinero para otros gastos o inversiones municipales a partir del próximo año, cuando se celebran las elecciones municipales.
El concejal de Hacienda, Juan Seva, explica que el ministerio ofrece al Ayuntamiento esta posibilidad para optar a una reducción en los intereses del primer rescate. La Junta de Gobierno aprobará el lunes iniciar el trámite de la nueva contratación. El crédito se firmó en mayo de 2012 con doce entidades bancarias, que prestaron al Ayuntamiento diferentes cantidades hasta sumar casi 48 millones de euros. El plazo de devolución era de diez años, de los que ya han pasado dos. Según Seva, el nuevo préstamo que se contrate no conllevará una ampliación de los plazos de amortización.
A día de hoy, las arcas municipales adeudan en torno a 45 millones de euros, dado que el resto se ha ido pagando desde 2012. El interés inicial era del 5,25%, pero en mayo de este año la entidad local se acogió a la posibilidad que le ofreció el ministerio de reducir el interés al 3,85% a cambio de un mayor control sobre las facturas. Ahora, el Ayuntamiento pretende lograr una reducción adicional.
Para ello, Seva pretende concertar un nuevo préstamo por el importe pendiente de amortizar: 45 millones de euros. «Ahora el mercado financiero es más favorable y podríamos obtener un interés más bajo», sostiene el edil. Seva indicó que la intención es que ya en diciembre pueda regir el nuevo préstamo. Para ello, previamente se deberá cancelar el anterior, para lo que habrá que pagar una cuota de amortización.
Incluso así, el edil confía en que la operación sea beneficiosa para las arcas municipales. «Aliviaríamos así nuestra carga financiera», añade.
La medida se adoptará con el primero de los préstamos del rescate, pero no con el segundo de ellos, que se contrató por 27 millones en abril de este año, dado que el ministerio sólo permite hacerlo con el primer crédito.
