Una nueva avería en el AVE Madrid-Alicante volvió a dejar colgados a 310 pasajeros a última hora de la tarde de ayer en las proximidades de Albacete. El tren había salido de Madrid a las 18.25 horas y debía haber llegado a Alicante las nueve de la noche, cuando en torno a las 19.55 se detuvo. Debido a la avería, los viajeros tuvieron que ser transbordados a otro tren desplazado al lugar para tal efecto, tras permanecer hora y media en el interior del convoy averiado, sin aire acondicionado debido al corte de la electricidad.

Gilles, pasajero del tren que se dirigía a Alicante, explicó que, debido al corte de electricidad por la avería, en el interior de los coches se alcanzó una temperatura de 35 grados. Esta circunstancia, tal y como señaló el mismo viajero, generó visibles molestias a una parte de los usuarios, si bien comprendieron la incidencia.

Al cabo de aproximadamente una hora y media, hasta el lugar llegó el tren sustitutorio, al que los viajeros tuvieron que acceder mediante una pasarela. El transbordo se completó, según fuentes de Renfe, a las 21.33 horas. La compañía devolverá a los 310 viajeros el importe íntegro de los billetes.

En el tren viajaba el portavoz municipal de UPyD en Alicante, Fernando Llopis, así como la exconcejal de EU en Alicante María Teresa Molares.

Llopis restó importancia al incidente y señaló que el personal de Renfe les trató muy bien.

Por su parte, María Teresa Molares no se podía creer que este tren de alta velocidad, en el recorrido que une la capital con la provincia, ya haya tenido tres averías. "La infraestructura no debe de estar bien terminada", apuntó.

Esta es la tercera incidencia que se produce por cuestiones técnicas desde la puesta en funcionamiento del AVE entre Madrid y Alicante, tras la que se produjeron los días 19 y 25 de junio.

Asimismo, el 22 de junio otro problema en la venta de billetes produjo un retraso de una media hora en otro de los trenes.

Uno de los viajeros comentó a este diario que durante la hora que han estado esperando al otro tren la situación ha sido muy agobiante, ya que hacía mucho calor y hubo gente que se mareó.

De hecho, aunque también hubo pasajeros que destacaron la normalidad con la que los usuarios del tren se tomaron la avería, coincidieron en quejarse de las altas temperaturas que tuvieron que soportar. Así, una de las afectadas explicó que el tren que llegó a por ellos tardó una media hora pero el transbordo no se completó hasta pasada una hora y media, ya que todos los pasajeros debían abandonar el tren averiado y subir al que estaba operativo por una única puerta.

TESTIMONIOS

AFECTADO

«Repartieron un folleto para que nos abanicáramos»

«Nos han comentado que han cortado la luz y el aire acondicionado por cuestiones de seguridad». El pasajero resaltó el nerviosismo de algunos de los miembros de la tripulación del tren y relató que les repartieron un folleto durante el parón y la mayoría creía que era una carta de cena, ya que se encontraban en el vagón de preferente. «Para nuestra sorpresa nos ha dicho la señorita que era para abanicarnos porque hacía mucho calor».

AFECTADO

«Se alcanzó una temperatura de 35 grados en el interior»

Otro de los pasajeros del tren averiado relató que el calor fue lo que más molestias causó a todos los viajeros. «Debido al corte de electricidad se alcanzó una temperatura de 35 grados en el interior de los coches». No obstante, el usuario también destacó que «desde el primer momento, la tripulación del convoy informó a los pasajeros de lo que estaba pasando y de que seríamos transbordados a otro tren».

AFECTADA

«Hacía mucho calor y hemos tenido que abrir las puertas»

Otra de las afectadas también se refirió al calor que tuvieron que soportar los pasajeros. «Hacía mucho calor y hemos tenido que abrir las puertas, ya que entre que ha llegado el tren de repuesto y en el transbordo, hemos estado casi dos horas, ya que teníamos que salir todos por una misma puerta y subirnos al otro vehículo también por un solo acceso». Pese a ello, «la gente estaba tranquila e incluso ha habido quien se ha comido el bocata».