El tinglado de 74 entidades, organismos, sociedades mercantiles, consorcios y fundaciones públicas de la Generalitat todavía mantenía, a lo largo del año pasado, una legión de 12.524 personas contratadas. Un volumen de empleados que representó un coste en nóminas para las arcas públicas de 450,3 millones de euros. Y ello en puertas de los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) anunciados por el Ejecutivo y que hasta diciembre deben conllevar entre 4.000 y 5.000 despidos. Así lo revela la Cuenta General de la Generalitat correspondiente al año 2011, que pone de relieve que la Administración autonómica redujo por primera vez plantillas, aunque en un escaso 3,2 %, 422 personas. La minoración también conllevó un ligero ahorro respecto a 2010, de 12,3 millones -un 2,7 % menos-, ya que el desembolso en gastos de personal fue hace dos ejercicios de 462,6 millones.

Los datos -que en algunos casos hacen referencia a puestos de plantilla y en otros, a número de perceptores- aluden en ocasiones a entidades que ya a finales de 2011 o en 2012 se han visto afectadas por procesos de liquidación o extinción. El impacto en las cuentas, sin embargo, no se apreciará hasta este ejercicio. Las cifras sitúan al Servicio Valenciano de Empleo como la firma con mayor número de nóminas abonadas en 2011, 1.898, frente a las 1.761 de 2010; seguida de Ferrocarrils de la Generalitat (FGV), 1.885 (1.933 el año anterior); y Radiotelevisión Valenciana (RTVV), 1.717, que únicamente redujo en 23 el número de empleados en relación a 2010. El ente público está ahora inmerso en el mayor de los ERE que promueve el Ejecutivo y que debe conllevar el despido de 1.198 trabajadores.

Tras RTVV, aparece Vaersa, con 1.585 empleados a lo largo de 2011 (1.645 en 2010); seguida del Instituto de Atención a los Discapacitados (Ivadis), en el que se reconoce un número medio de contratados de 971 personas (1.204 el año anterior) aunque los puesto de plantilla son 566. Después, aparece el Instituto de Investigaciones Agrarias, con 471 perceptores; y la Ciutat de les Arts i les Ciències, SA (Cacsa), con 343, junto a la Fundación Palau de les Arts, otros 318. El Ivvsa está con 333 trabajadores.

Otras entidades destacadas son la Agencia Valenciana de Turismo, 223; el Ivaj, 176; la Agencia de Prestaciones Sociales (Avapsa), 143; el Instituto Valenciano de la Música, 122; Ciegsa, 91; IVEX, 62; y Proyecto Cultural de Castellón, 49. Entre la Ciudad de la Luz y la fundación ligada a ésta suman otros 54 empleados. La Fundación del Hospital La Fe tiene a 174 personas, mientras la Oftalmológica del Mediterráneo suma 94; la Universidad Internacional Valenciana, 92; y La Luz de las Imágenes, 55.

Además de RTVV, están este año inmersos en ERE entes como el Ivvsa (211 despidos), Cacsa (141), Vaersa (350) o Ciegsa (70). Este mes se anunciarán el resto de expedientes, para ejecutar los despidos en octubre, tal como anunció antes del verano el conseller de Economía, Máximo Buch.

FGV y RTVV, las de más gasto

En cuanto al peso para las arcas públicas de la nómina de contratados, FGV se lleva la palma, con un desembolso declarado en 2011 en capítulo uno de 89,2 millones; seguida de RTVV, 73,9 millones; el Servef, 58,2 millones; Vaersa, 46 millones; el Ivadis, 21 millones; la Fundación Palau de les Arts, 14,5 millones; y el Ivvsa, 13,6 millones.

En los gastos de personal se incluyen, en su caso, los costes por los ERE iniciados o acometidos a finales de año. En la Fundación del Servef el recorte de 73 a 38 empleados -35 menos- conllevó la provisión de 450.856 euros por las indemnizaciones, mientras en la Fundación Valenciana de la Calidad se dotaron 149.796 euros para pagar los despidos aprobados el pasado 27 de diciembre.

Un Consorcio Espacial

con 8 personas y 150.000 euros en

La maraña de entidades, organismos y sociedades sin ánimo de lucro que ha ido tejiendo el Consell a lo largo de estos años -y que ahora el Gobierno le exige jibarizar al máximo- ofrece un variopinto menú de SA donde apenas quedan ámbitos en los que la Generalitat no pusiera una pica. Por tener, hasta se cuenta con un Consorcio Espacial Valenciano, conformado, además de por el Consell, por el Ayuntamiento de Valencia y las universidades Politécnica y de Valencia. El "Val Space Consortium", constituido en marzo de 2010 con el aliento del expresidente Francisco Camps, registró en 2011 unos gastos de personal de 150.827 euros -de un total de gastos anual de 754.384- y cuenta con tres ingenieros, dos interinos y tres becarios. Además, da becas formativas. La entidad está centrada en la puesta en marcha de un Laboratorio Alta Potencia en Frecuencia para aplicaciones en el espacio, en colaboración con la Agencia Espacial Europea. El objetivo de la fundación es la "investigación científica y servicios de desarrollo tecnológico en cualquier ámbito de actividad relacionado con el sector Espacio" y el "incremento de la seguridad y de la calidad de producción de los sistemas espaciales". Su ambición es participar en "programas de investigación y desarrollo en el campo de la tecnología espacial". j. g. g.