El sumario del caso Brugal recoge múltiples conversaciones entre Luis Díaz Alperi y Enrique Ortiz en las que queda de manifiesto "la estrecha e íntima relación existente" entre ambos, y que se manifiesta con rotundidad durante las vacaciones que ambos pasaron juntos en el verano de 2008, cuando todavía Alperi era alcalde. Esta amistad entre empresario y primer edil fue negada por ambos, y así lo recuerda el sumario, cuando la investigación del caso de los presuntos favores de Alperi a Ortiz en tres estacionamientos.

Alperi y Ortiz pasaron esas vacaciones de agosto de 2008 en Baleares, hasta donde se desplazaron con sus respectivos yates. El sumario señala que Alperi llegó a las islas "el día 14 de agosto por la noche junto con su mujer Elisa, a bordo también de su embarcación", y añade que este viaje se produce dos días después de volver el alcalde "del viaje realizado a la isla griega de Creta". Este viaje, como se recordará, consistió en unas vacaciones del alcalde durante dos semanas en la isla griega acompañado de Sonia Alegría Polo, entonces delegada municipal por decisión de Alperi y ahora concejal, tras ser elegida en las pasadas elecciones. Un viaje con un jet privado que costó mas de 35.000 euros y que presuntamente pagó Enrique Ortiz.

Estando en esas vacaciones con Sonia Alegría, Ortiz le pregunta a Alperi, en una llamada telefónica, si "te reservo un amarre en Mahón para tu barco", durante tres días, respondiendo el alcalde que sí, al tiempo que le indica las medidas de su yate, "un catamarán de 15 metros por 8,40".

Otra conversación del 4 de agosto muestra "aún más si cabe la estrecha relación entre ambos", indica el sumario policial, ya que en la misma Ortiz le pregunta si tiene algún camarote libre en su barco para alojar a alguno de los familiares que ha invitado a su yate, entre ellos a la familia de su hermana.

En otra llamada ese mismo día Ortiz le revela a Alperi que "cuenta en su barco durante dos días, por invitación suya, a Joaquín Ripoll, presidente de la Diputación". El primer encuentro entre Ortiz y Alperi será en el puerto de Soller el 14 de agosto. Al día siguiente ambos se citan, primero en el barco del alcalde y luego en el del empresario.

Sobre el precio de los tres días de amarre en Mahón, Alperi expresa su queja a Ortiz por su elevado coste, a razón de 308 euros la noche y le reprocha que lo haya reservado por agencia, por tener que pagar comisión. Es más, el alcalde intenta que el empresario corra con el pago de los amarres al preguntarle "qué hago, que te lo facturen a ti o qué es lo que hago", pero Ortiz en esta ocasión no transige y le responde a Alperi "tu paga tu amarre y punto". No obstante, un cambio de planes provoca que se suspenda la visita a Mahón, y acudan a Soller e Ibiza.

A las vacaciones de Baleares se unirá más tarde la entonces edil de Urbanismo, Sonia Castedo, y su marido, el día 24 de agosto, aprovechando un breve regreso de Ortiz en Alicante. En conversación con la edil, Ortiz le informa que en el barco irán también las dos hijas del alcalde. Castedo y su marido pasarán luego unos días de descanso en el yate de Alperi.

El sumario insiste en la "profunda amistad y colaboración" entre el empresario y el alcalde para lo cual hace referencia a las comidas, cenas y encuentros entre ambos en calas y playas entre los días 25 y 27 de agosto. Este último día Castedo le pide a Ortiz que le recoja del yate del alcalde. Finalmente, el día 28 Ortiz regresa a Alicante y así se lo comunica al alcalde cuando está a la altura de Benidorm. Del sumario se deduce que junto al empresario también viaja en su yate la edil de Urbanismo.

Ortiz conoce la dimisión de primera mano

La "profunda amistad" entre Alperi y Ortiz se manifiesta también, según el sumario policial, con motivo de la dimisión del alcalde, ya que Ortiz es uno de los primeros en enterarse por boca del propio Alperi. La comunicación telefónica se produjo el 11 de septiembre de 2008, poco antes de las 17 horas, con la siguiente conversación. "Alperi (A): Dentro de un cuarto de hora doy una rueda de Prensa y dimito como alcalde. Ortiz(O): ¿Por qué? A: Porque sí, porque ya está bien. O: ¿Qué me dices? A: Pues lo que te digo. He estado toda la mañana con Camps y estamos de acuerdo, está aquí conmigo, y Ripoll y Sonia. Se queda Sonia claro. O: ¿ Me lo dices en serio? A: Claro que sí. O: ¿ Y se queda Sonia? A: Evidentemente, si no se queda Sonia yo no me voy. O: ¿ Pero en serio que hoy dimites? A: Que sí. O: Joder, qué huevos tienes, pero bueno". El empresario alberga dudas de la dimisión a lo que el alcalde le responde que "ya verás las noticias". O: ¿ Ya lo sabe Sonia y todo? A: Sonia está aquí conmigo para dar la rueda de Prensa. O: Bueno pues enhorabuena a los dos. A: Toma felicítala directamente (y le pasa el teléfono a la edil). Sonia Castedo (C): Dime Enrique. O: Buenas tardes señora alcaldesa. C: Calla, calla. O: Éste es un crack. Bueno pues felicidades. C: Te paso con Luis (coge el teléfono Alperi). O: Dentro de un rato ya no serás mi amigo el alcalde, sólo serás mi amigo. A: Eso espero. O: Lo celebraremos.