El incendio declarado en la tarde del miércoles en la Serrella y el puerto de Confrides ha arrasado alrededor de 30 hectáreas de alto valor ecológico. Los medios de extinción lograron estabilizar el fuego a primera hora de la mañana de ayer tras calmarse el viento y bajar las temperaturas, aunque a lo largo de toda la jornada siguieron trabajando con el objetivo de controlar la situación, lo que se logró a las ocho de la tarde. La carretera comarcal que une Alcoy con Benidorm, que permanecía cortada en la zona del puerto desde que se declaró el siniestro, también se reabrió al tráfico.

Tal y como informó ayer este diario, el incendio se declaró alrededor de las seis y media de la tarde del miércoles en la cuneta de la carretera comarcal CV-70, en las cercanías de Ares del Bosc y justo en los accesos al puerto de Confrides. Las llamas, empujadas por el viento, se propagaron rápidamente en dirección ascendente por la cara sur de la Serrella, y además por una zona muy escarpada, lo que dificultó las tareas de extinción. Así lo señalaba el sargento de bomberos que se encontraba al mando de los trabajos, quien también destacó la densa humareda, que dificultaba mucho la visibilidad.

La retirada con la llegada de la noche de los ocho medios aéreos que llegaron a intervenir hacía presagiar lo peor, toda vez que un frente de fuego continuaba avanzando sin control en dirección a la cima del puerto. Sin embargo, el descenso de las temperaturas, así como la disminución de la velocidad del viento, permitió a los medios terrestres estabilizar las llamas alrededor de las siete de la mañana, momento en que se reincorporaron a las tareas helicópteros e hidroaviones. A lo largo de toda la jornada de ayer se continuó trabajando en la zona, declarándose el incendio controlado a las ocho de la tarde.

Pese a que los daños finalmente no han sido tan elevados como se podía presuponer en un principio, las 30 hectáreas que finalmente han ardido se corresponden con una zona de alto valor medioambiental y paisajístico. Las llamas, de hecho, han devorado amplias áreas de pinar adulto, en una montaña considerada por muchos de los amantes del excursionismo como la más bella de la provincia de Alicante.

Mientras tanto, prosigue la investigación respecto al origen del fuego, especulándose con la posibilidad de una colilla o incluso con un acto intencionado.