Los vecinos de Alcoy ya pueden votar desde ayer las 15 propuestas elegidas para los presupuestos participativos de 2016, entre las que, finalmente, no se encontrará el estudio para la reapertura de las fuentes y surtidores públicos cerrados por la legionela, al considerarse demasiado compleja desde el punto de vista técnico y administrativo.
Esta era, sin duda, una de las iniciativas vecinales más relevantes, toda vez que las fuentes, lagos y surtidores públicos llevan fuera de servicio en Alcoy desde que en septiembre de 1999 se iniciaran los brotes epidemiológicos de legionela. Desde el Ayuntamiento se ha significado en numerosas ocasiones que las dificultades técnicas que incorpora el protocolo de prevención de la bacteria hacen prohibitivo el coste de la reapertura y mantenimiento, para lo que se ha llegado a plantear la búsqueda de sistemas alternativos.
Los vecinos incidieron en este punto y plantearon para los presupuestos participativos de 2016 un estudio para la reapertura, que ha sido descartado de plano por los técnicos municipales. En concreto, han incluido esta actuación en el apartado de «propuestas con excesivas dificultades técnicas o administrativas o también por la ambigüedad de la propuesta», si bien en este caso concreto apunta claramente al primer apartado.
En realidad, la cuestión de las fuentes es una más de las 29 que han sido descartadas por diversos motivos, de manera que los vecinos sólo podrán votar 15 hasta el próximo 30 de noviembre. En la lista de desestimaciones figuran los dos centros cívicos polivalentes para el Ensanche o el carril bici en toda la ciudad; también están las tres actuaciones para el colegio San Vicente, al no ser competencia municipal, o la segunda fase del proceso participativo para la plaza Al-Azraq, por no ser una inversión, por citar algunas de las más destacadas.
En cambio, sí figuran las mejoras en parques, la sustitución de los plataneros de la avenida Gil-Albert o el paso para peatones por debajo del puente de Cervantes, desde el cauce del río a Sent Benet. Esta actuación tendría un notable impacto lúdico, toda vez que permitiría acceder desde el área rehabilitada del cauce del río hasta Sent Benet y de ahí por el polígono industrial hasta el cementerio, cogiendo la vía verde en cualquier de los dos sentidos o los accesos a la Font Roja, sin necesidad de utilizar las vías principales con mucho más tráfico.
