El brote de legionela de Alcoy, el decimoséptimo en su historia, registró ayer el undécimo afectado, según comunicó la Conselleria de Sanidad a primera hora de la tarde. En este caso, se trata de un paciente cuyo estado no ha requerido hospitalización, por lo que se presume que no es grave. En el Hospital Virgen de los Lirios, sin embargo, siguen ingresados tres afectados más, que evolucionan favorablemente, de acuerdo con la información facilitada por la conselleria.
Una semana después de que se constataran los tres primeros casos, Sanidad tuvo constancia de otro nuevo que, sumado a los de los días anteriores, implican un total de once afectados. La incidencia del brote es reducida, en comparación con lo que suele suceder en otras poblaciones, pero no se detiene.
Además, al mediodía de ayer se celebró una reunión en el Ayuntamiento de Alcoy, en el transcurso de la cual los técnicos de Salud Pública, los del departamento municipal de Medio Ambiente y los de Aqualia pusieron en común la situación. Allí, quedó claro que el foco sigue sin haber sido localizado y que en estos momentos «se están intensificando las inspecciones en los aparatos de riesgo y en la red de agua potable», según explicó el alcalde Antonio Francés al término de la sesión. Sanidad no conocía durante la reunión el nuevo caso, por lo que no lo comunicó directamente, según pudo saber este diario.
Tanto el alcalde como Paco Agulló, teniente de alcalde de Medio Ambiente, señalaron que los controles van a continuar de manera intensiva. Acerca de la situación de la red de agua, Agulló indicó que «es uno de los factores de riesgo, pero hasta el momento los continuos análisis que se están efectuando han dado negativo».
Mientras tanto, tres personas siguen hospitalizadas en el Virgen de los Lirios como consecuencia de la neumonía por legionela que padecen, aunque Sanidad subraya que su evolución es favorable, salvo que se registren complicaciones. Se trata de personas de cierta edad e incluso una reside en un centro geriátrico.
