El pintor Ximo Canet ha dado sus últimas pinceladas del mural que en la Zona Norte recuerda a Miguel Hernández, a la espera de que empiece el nuevo curso académico y los alumnos del colegio que lleva el nombre del poeta oriolano puedan completar el trabajo. Este proyecto, además, cumple una función educativa, ya que los escolares van a tener la oportunidad de conocer un poco más tanto la literatura de Hernández como el arte de Picasso.
Tal y como avanzó este diario, el pintor Ximo Canet inició el pasado mes de julio un mural frente al colegio Miguel Hernández de Alcoy. La obra pretende hacer reflexionar sobre la situación en la que se encuentran muchos menores cuyas familias no tienen recursos económicos, así como homenajear al poeta oriolano y cumplir una función educativa.
El trabajo de Canet ocupa cuatro de los dieciocho metros que mide la pared y plasma el rostro de Miguel Hernández, una réplica del Guernica -en concreto la imagen en la que un niño llora- y una protesta estudiantil. Además, los alumnos del colegio completarán el mural con fragmentos de reconocidos poemas, como «Nanas de la cebolla», «El niño yuntero» y «Como el toro».
El concejal de Cultura, Paco Agulló, explica que «la idea es que los escolares puedan trabajar en las aulas tanto la literatura de Miguel Hernández como el arte de Picasso, como los valores humanos y universales que tienen implícitas sus creaciones».
El coste para el Ayuntamiento ha sido mínimo, ya que se ha limitado a proporcionar los materiales que ha utilizado Ximo Canet. El artista, que ha querido colaborar con la administración municipal y el colegio facilitando los textos en que se ha inspirado como recursos didácticos, ha utilizado pigmentos naturales como la tierra, el café y la canela para pintar la obra.
Tal y como destaca Agulló, «estamos convencidos de que se trata de una muy buena iniciativa, porque nos ayuda a poner en contacto las artes plásticas con la educación en la cultura de la paz y la no violencia». Asimismo, el responsable del área de Cultura explica que «los alumnos del centro podrán tratar los contenidos y las ideas de este mural relacionado con la literatura, el arte, la justicia o la propia educación», e incluso, «interactuar con la creación para completarla con sus aportaciones».
Paco Agulló califica el proyecto de «muy bonito» y espera poder llevar a cabo nuevas iniciativas de este estilo en otros centros educativos de la ciudad. Por su parte, Ximo Canet está satisfecho con el trabajo realizado y espera con ilusión que arranque el nuevo curso académico para poder contemplar la obra completamente terminada.
