Trece años después de acordarse la cesión de un millón de metros cuadrados a El Campello como contraprestación a la instalación del vertedero de las Marinas en el municipio, el Ayuntamiento ya dispone de los terrenos. El alcalde Benjamín Soler firmó ayer el contrato de traspaso de la parcela que se encuentra junto a la planta con los representantes de FCC. La firma, que se tendría que haber realizado el pasado mes de diciembre, se tuvo que posponer a instancias de la autoridad notarial, que adujo motivos técnicos.

Benjamín Soler manifestó tras el encuentro que completar esta cesión ha sido un objetivo del equipo de gobierno y que considera primordial destinar estos terrenos a fines medioambientales. Sin embargo, la parcela es de difícil acceso y será complicado darles una utilidad por su ubicación, ya que se encuentra entre el vertedero y la autopista AP-7.

El concejal de EU y presidente de la Comisión de Investigación de la Planta de Basuras de Les Canyades, Pedro Mario Pardo, ha mostrado su satisfacción por esta cesión, «aunque llegue con trece años de retraso», y recordó que este tema se destapó hace cuatro meses a consecuencia del trabajo fiscalizador del Consejo que él dirige. «Esto solo puede tener una posible explicación, el desinterés de este equipo de gobierno por defender lo que le pertenece a la ciudadanía de El Campello. Igualmente, demuestra el escaso apoyo que reciben los y las vecinas de la zona, dado que esta medida no solo implica la recuperación de una terreno sino además la implementación de medidas medioambientales», añadió Pardo, quien espera que el Ayuntamiento estudie su propuesta de reforestación para crear una barrera natural frente a los olores.