Quinto año con superávit millonario en El Campellosuperávit millonario . La liquidación de las cuentas de 2015 ha arrojado un saldo positivo de 6,9 millones de euros, gracias sobre todo a los ingresos por el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) y a la contención del gasto derivada de la Ley de Estabilidad Presupuestaria y los ajustes municipales. Esta cadena de superávits ha llevado a que el Consistorio esté completamente saneado, ya que la ley obliga a amortizar los préstamos con parte de los saldos positivos y en 2014 el Ayuntamiento canceló las deudas que quedaban con entidades financieras.
Desde el tripartito formado por Compromís, Partido del Campello (Podemos) y Demòcrates señalaron ayer que «la liquidación arroja un resultado final presupuestado ajustado de 6.906.757 euros. El año anterior fue de aproximadamente de 5.700.000, lo que arroja un ahorro de casi un millón de euros durante este último año».
Las mismas fuentes destacaron que «a partir de este momento el equipo de gobierno, junto con el resto de Corporación, estudiará qué proyectos financieramente sostenibles son los más indicados para efectuar en 2016».
Eso sí, hay que recordar que el Ayuntamiento sigue sin presupuestos aprobados de este año, ya que están prorrogados los de 2014 -en 2015 tampoco hubo cuentas nuevas- y ya no habrá para el presente ejercicio. En el pasado pleno el PP preguntó al tripartito por este tema, y el alcalde Benjamí Soler reconoció que en las fechas que son es muy probable que no haya nuevas cuentas y se centren en confeccionar con tiempo las de 2017, ya que con los actuales plazos y en verano, unas nuevas cuentas no estarían vigentes hasta otoño, y para sólo tres meses no parece lo más lógico, como advertía el PP. Hasta ahora no ha habido ninguna reunión de trabajo sobre los presupuestos para 2016 y la precaria situación del tripartito, lejos de una mayoría estable, más los problemas surgidos como la anulación del PGOU y varias bajas de funcionarios, han dificultado este tema.
El primer edil confirmó ayer a este medio que van a ponerse a trabajar ya en las cuentas de 2017, aunque no descarta elaborar unos presupuestos «de urgencia» para salir adelante los meses que quedan. Y aclaró que aunque no haya nuevos presupuestos, esto no afecta a las inversiones que se hagan.
Sin deudas
Los saldos favorables desde 2011, cuando había una deuda viva con los bancos de 12 millones, permitieron enjugar estas obligaciones progresivamente, amortizándose los préstamos que quedaban pendientes el 31 de diciembre de 2014 con parte del superávit de 2013.
El Ayuntamiento viene obteniendo desde 2011 superávits millonarios que suman ya más de 39 millones, aunque la suma no es exacta, ya que lo que no se ha podido gastar un año del superávit se contabiliza en el del siguiente año. Pese a que el ejercicio 2010 se cerró con saldo negativo, en 2011 las cuentas lograron un remanente positivo de 6,4 millones de euros, mientras que tanto en 2012 como en 2013 se rondaron los 8,1 millones, y en 2014 se disparó hasta los 9,8 millones, aunque en el balance final de presupuesto ajustado de 2014 se reflejaba 5,7 millones, y 6,9 millones en el de 2015 por el mismo motivo.
A estos superávits ha ayudado de forma decisiva la revisión catastral de 2007, que está prorrateada a diez años -acaba en 2017, ya que empezó a aplicarse en 2008- y que ha duplicado el recibo del IBI. De todas formas, para 2017 el Ayuntamiento ha anunciado que por fin bajará el recibo, tras aprobar el pleno el pasado mes de mayo acogerse a un coeficiente actualizador de los valores.
