Las Navidades son una época de muchos excesos, se incrementa el consumo de dulces, fritos, comida copiosa y comemos con horarios descontrolados. ¿El resultado? En las vacaciones engordamos hasta 3 kilos según la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición. Esto hace que muchas veces volver a la rutina sea difícil, tras un largo tiempo de descanso. No se trata de perder los kilos ganados lo más rápido posible a base de dietas milagro o suprimiendo alimentos, sino hacerlo de manera progresiva para que el efecto sea el deseado, es decir, recuperar nuestro peso ideal. El secreto, alimentación saludable y por supuesto, ejercicio físico.

Con el fin de ayudarnos a combatir el temido síndrome postvacacional, la nutricionista Carla Sánchez-Zurdo da las claves para controlar el peso en vacaciones.

Cinco trucos para adelgazar

1. Si no eres muy amante del agua... ¡alíate con las infusiones! No podemos olvidar el consumo diario de agua, en torno a los 2,5-3 litros. Además, si te gustan las infusiones y los tés, hay una gran variedad con propiedades depurativas y diuréticas, que te ayudarán a recuperar el cuerpo de forma más rápida, a reajustar el metabolismo del cuerpo y eliminar las toxinas acumuladas.

2. Come frutas y verduras de temporada. Comer frutas y verduras de temporada es clave para llevar una alimentación saludable y sostenible. Entre las verduras encontramos la espinaca, la escarola, el brócoli o las berzas. Todas ellas ideales para hacer menús sabrosos y saludables.

3. Quemar comiendo. Para conseguirlo, una buena forma es comer alimentos que elevan la temperatura corporal y aceleran el metabolismo. Es decir, condimentos picantes como el curry, la pimienta cayena o la cúrcuma.

4. Comer alimentos integrales. Como los copos de avena, la pasta o el arroz integral, al ser integrales contienen una mayor cantidad de nutrientes, y son ricos en fibra insoluble, lo que favorece el tránsito intestinal y crea sensación de saciedad.

5. Desayunos fuertes. Debes recuperar tus cinco comidas diarias: un desayuno completo; una fruta o batido saludable a media mañana; una comida más cercana a las doce del mediodía que a las cuatro de la tarde; un yogur o puñado de frutos secos para merendar; y una cena ligera una hora y media antes de acostarte