La mayoría de la población sufre problemas de visión como miopía, hipermetropía o astigmatismo y quiere dejar de usar gafas o lentillas. Las opciones quirúrgicas como la cirugía refractiva con láser y el implante de lente intraocular completan las alternativas quirúrgicas para olvidarse de las gafas definitivamente.

Según el doctor Enrique Chipont, director médico de Oftálica y especialista en Oftalmología, «las técnicas más utilizadas en cirugía refractiva son LASIK y LASIK con femtosegundo por sus excelentes resultados y rápida recuperación. Otra alternativa es la PRK que es un tratamiento de superficie empleado en casos específicos pero que implica una larga y molesta recuperación. Pero el implante de lente intraocular es una alternativa al láser menos conocida para corregir los problemas de miopía, hipermetropía o astigmatismo».

¿Cuál ofrece mayor calidad de visión?

La mejora de la visión y no dependencia de una corrección óptica como las gafas o las lentes de contacto pasa por una operación de ojos tanto con cirugía refractiva láser como con implante de lente intraocular, ambas proporcionan una buena agudeza visual, pero la lente intraocular es la opción que ofrece mayor calidad de visión, mejor que las gafas, las lentillas o la cirugía láser.

«Esto se produce porque la lente ICL la implantamos dentro del ojo, sin alterar su estructura, sin ocasionar molestias ni rechazos y permitiendo que el ojo use su propio sistema de refracción de manera que vemos los objetos a tamaño natural», explica el doctor Chipont.

La lente intraocular y la cirugía láser

La diferencia más importante es que la cirugía refractiva láser no es un tratamiento reversible. Las técnicas LASIK y las PRK tallan la córnea del paciente con láser alterando para siempre su estructura, de forma segura y controlada.

En cambio, las lentes intraoculares las podemos reemplazar o retirar sin problema si fuera necesario y el ojo volvería a su estado previo a la operación.

La cirugía refractiva con láser también tiene sus limitaciones como los pacientes con córneas finas o con alta miopía donde no es una buena opción. De hecho la mitad de los pacientes no son aptos para la intervención con láser.

Las lentes intraoculares en cambio pueden corregir todo tipo de miopías incluyendo las altas y córneas finas o con pupilas grandes que no son aptos para tratamientos láser.

Postoperatorio

El doctor Chipont explica que «la experiencia del paciente durante la operación de ojos es muy similar en todos los caso: son intervenciones de corta duración. Las diferencias comienzan después de la operación, ya que tanto los pacientes operados con LASIK como los que lo hacen con implantes ICL disfrutan de una rápida recuperación y una buena visión al día siguiente, en cambio los operados con PRK sufrirán molestias y no verán bien durante varias semanas».

Otra cuestión, son los problemas de ojo seco que las las cirugías refractivas con láser ocasionan de forma temporal a diferencia de la operación para implantes que no altera la estructura corneal por lo que ésta se sigue lubricando con normalidad.

En definitiva, la operación de ojos con implante de lente intraocular es posiblemente la mejor opción para que la mayoría de pacientes corrijan con garantía su visión.