El cáncer de mama es uno de los tumores más frecuente entre la población femenina en todo el mundo. Afortunadamente, las campañas de prevención permiten un diagnóstico cada vez más precoz, lo que posibilita altas tasas de curación.

La mamografía y ecografía son pruebas iniciales recomendadas para mujeres sin riesgo a partir de los 30 años y a partir de los 25 con riesgo. En los casos en los que la sospecha de malignidad es elevada, la resonancia nuclear magnética es la prueba que aporta una información más precisa y fiable, para confirmar o descartar el diagnóstico.

Tipos de lesiones mamarias

Las lesiones mamarias son de dos tipos: las palpables (aquellas que el paciente y el médico son capaces de localizar y cuya punción para biopsia es fácil) y las no palpables (presentan un hallazgo anormal en la exploración radiológica y precisan ser biopsiadas).

En los dos casos (palpables y no palpables) el estudio debe completarse con una ecografia de la axila para aportar información sobre el aspecto de los ganglios linfáticos regionales, lugar frecuente donde reside la metástasis.

El protocolo establecido en HLA Vistahermosa, ante un diagnóstico confirmado de cáncer mamario, es someterlo a la valoración por el Comité de Tumores, formado por oncólogos, ginecólogos, radiólogos, patólogos y cirujanos que evalúa semanalmente todos los casos desde una perspectiva multidisciplinar. Completada la valoración, si la paciente precisa una intervención quirúrgica es remitida a la Unidad de Patología Mamaria.

Durante la intervención, se lleva a cabo la detección del ganglio centinela axilar, tanto si dicha intervención es conservadora (tumorectomia, cuadrantectomia) como si se opta por la extracción completa de la mama (mastectomía). La estancia media en planta de hospitalización es de 24 horas en la cirugía conservadora y 48 a 72 hrs en la cirugía radical.

Una vez obtenida la biopsia definitiva, el paciente es remitido al área de oncología para la optimización y adecuación del tratamiento.

Cirugía plástica y reconstructiva, crucial

La cirugía plástica y reconstructiva es una parte muy importante en la unidades de mama. Sin la participación de estos profesionales, especialmente en mastectomías (cirugía radical), el resultado de este tipo de operaciones mermaría aún más la autoestima y la vitalidad de las pacientes, aspectos cruciales para su recuperación.

Si la mastectomia es por una mama de riesgo (aquellas de difícil control clínico radiológico o con lesiones premalignas) o en pacientes portadoras de mutaciones genéticas (BRCA 1 y 2), se practica la reconstrucción inmediata, bien a través de prótesis o bien utilizando tejido de la propia paciente (autólogo) compuesto por piel y músculo.

El manejo del paciente con cáncer de mama es extraordinariamente complejo y requiere de experiencia, medios técnicos y profesionales específicamente entrenados. Han de ser capaces de responder a las necesidades de la paciente y su familia, haciendo que se sientan comprendidos, acogidos y amparados en todo momento.