Teniendo en cuenta que entre el 60 y el 70% de nuestra salud está condicionada por el entorno y se pasa alrededor del 90% del tiempo en múltiples lugares cerrados en los que el nivel de contaminación es muchas veces mayor que en el exterior, resulta imprescindible crear espacios de trabajo saludables.

Si a esta idea le añadimos lugares concretos como son los destinados a la sanidad (hospitales, centros de salud o de tratamiento), la premisa de crear entornos que favorezcan la sensación de bienestar es indispensable.

Y es que, aunque el objetivo principal de estos espacios hospitalarios es el diagnóstico y tratamiento adecuado de los pacientes, hay herramientas como el mobiliario que son facilitadores del bienestar durante la estancia en estos entornos.

La sanidad, al igual que otros sectores como la educación o las oficinas corporativas, están experimentando un proceso de cambio que busca situar a las personas en el centro de la organización.

En este sentido el espacio juega un rol importante a la hora de humanizar los proyectos. Este sector, además, se plantea un doble reto. Por una parte, busca ofrecer la mejor experiencia a los pacientes y a sus acompañantes. Hacer que se sientan en un entorno confortable y más humanizado, lo más parecido a estar en su casa o en un hotel.

Por otra, conseguir que los equipos sanitarios trabajen de una forma mucho más saludable y eficiente, a través de espacios que les hagan sentirse motivados, con un mobiliario que se traduzca en una mayor ergonomía, que facilite una comunicación más cercana y amable con el paciente, la colaboración entre compañeros de profesión.

Elementos como la iluminación, los colores, la acústica, o el mobiliario resultan clave para conseguirlo. Según indica Soledat Berbegal, Consejera y directora de reputación de marca de Actiu, «La siguiente revolución está en el bienestar y la humanización del espacio hospitalario».

Y en este proceso, «el mobiliario se convierte en una herramienta de trabajo que contribuye a la eficacia del proceso. Utilizar el mueble como herramienta para promover el bienestar, la ergonomía, la colaboración, la privacidad, la concentración o para distribución de flujos de trabajo, son algunos de los beneficios que aporta, más allá de su carácter decorativo», explica Berbegal.

En base a estos datos y sumando la experiencia adquirida a lo largo de sus 50 años de historia, Actiu ha pasado de fabricar muebles a transformar los espacios a través del diseño de su entorno, atendiendo a las diferentes áreas de actividad presentes en prácticamente todas las organizaciones y a las relaciones sociales que se establecen en un espacio laboral durante varias horas al día.

Algunos de los ejemplos más recientes en el sector sanitario, referente de servicio amable y orientado al paciente, ha sido la transformación realizada en el hospital Sant Joan de Déu, en Barcelona, el Hospital Álvaro Cunqueiro, de Vigo o el Hospital Universitario y Politécnico La Fe, de Valencia, entre otros.