ENVEJECER, UN TIEMPO DE OPORTUNIDADES - por Jaime Merino- Médico internista jubilado

Son rasgos que se adscriben al anciano en las sociedades occidentales modernas: viejo (en sentido despectivo), inútil, feo, incapaz, estorbo, pesado, carca o retrogrado, dependiente, antiguo, deteriorado o acabado.

Sin embargo y, aunque no lo hacemos, les son propios: experiencia, sabiduría, reflexión, disponibilidad de tiempo y de posibilidades, libertad, paciencia y generosidad; de hecho: nos abrió el camino, a veces nos lo dio todo y le debemos lo que tenemos.

Probablemente esos sesgos en la valoración se deben a los rasgos de la vida en nuestras sociedades, que se orientan más a hacer o tener que a ser o estar; a la eficacia, eficiencia, más que al esfuerzo o el mérito; mas a lo material que a lo espiritual; a la belleza externa más que a la profunda; a los resultados en vez de al proceso.

Vale más la inmediatez, rapidez que la serenidad o la reflexión; el consumo o el despilfarro que la parquedad o la moderación. Y en todos esos ítems los ancianos salen mal parados.

Algunas ideas acerca del envejecer: La senectud es el equilibrio, serenidad, satisfacción por el pasado, por lo hecho y lo vivido. Es asentarse. Cuando eres joven aprendes, pero cuando eres viejo entiendes. Los ancianos son las raíces de la sociedad, y la senectud es el tiempo de la cosecha.

El tiempo es fugaz

Los ancianos constituyen la mayor y la más minusvalorada reserva de energía humana aún por explotar en USA (M. Kuhn). El tiempo es fugaz y eso te enseña. Al envejecer tu vida se enriquece porque aprendes que te basta con lo que tienes.

Al madurar el oro pierde su brillo y descubres que el dinero solo te permite conseguir juguetes caros. Madurar es renunciar a lo que es excesivo y deleitarte con lo que es suficiente.

Son muchísimos los que triunfaron siendo viejos: Teresa de Calcuta, Einstein. Hemingway, Juan Pablo II, Gandhi, Washington, Mandela, Picasso, Cousteau, Pau Casals, Pio Baroja, Valle Inclán, Azorín, Ortega y Gasset, Marañón, Lao-Tze, Mao, el Dalai Lama.

Piense que no hay ningún recordman de los 100 metros lisos viejo, pero tampoco ningún presidente de USA adolescente: Y si lo piensa dos ancianos venerables Stephan Hassel y José Luis San Pedro han sido medio ideólogos de la indignación de los jóvenes en los últimos meses en España.

Y aquí aunque jubilamos a nuestros médicos a los 65 años, en la corte, los expertos, para operar al Rey buscaron a un médico de 72 años.

Piense lo que le dicen: Todos esperamos llegar a viejos, pero nos da miedo la vejez, J. de la Bruyere. La vida es lo que sucede mientras no me entero. Decía Picasso: Ser un buen anciano exige mucho tiempo de aprendizaje.

En la primera mitad de la vida deseas que llegue la segunda, en la segunda añoras la primera, John Lennon.

Lo que envejece bien tiene mucha calidad: la madera vieja es la mejor para quemar, El vino viejo es el mejor para beber, los amigos viejos son los mejores cuando hay que confiar, los autores antiguos son los mejores para leer, F. Bacon. Los jóvenes conocen las reglas, los ancianos las excepciones. Oliver Wendell.

Reflexión

Conviene reflexionar que: Cuando decrece la visión física se agudiza la visión espiritual, es decir, la capacidad de penetrar en el significado interior de las cosas. Saber envejecer es una obra maestra de la sabiduría, y uno de los componentes más difíciles del gran arte de vivir.

La edad te lleva a un punto en el que no existe otro lugar al que acudir en busca de consuelo que el interior de uno mismo, o apreciar la riqueza de las cosas que realmente cuentan. Envejecer es un cambio, en el que desaparecen las cosas habituales, a veces queridas.

Hay que negarse a vivir en el pasado. Es el ahora. Un punto fuerte del anciano es la sabiduría (que es lo que permanece cuando concluye una experiencia), los saberes. Es bueno que el anciano concentre su atención en los mejores ideales: asumir el rol de pensador, filósofo, polemista, interrogador.

A veces la vida hace que gente experimentada se mueva en un mundo en el que no sabe dónde ir. Los ancianos saben muchas cosas, entre ellas que la fuerza no es la mejor manera de ganar seguridad, que el dinero no siempre resuelve los problemas y que la corrupción socava los cimientos de la sociedad. Saben cuestionar si todo lo que puede hacerse debe hacerse. La vejez es un filón de verdades aprendidas.

Todos, y también los ancianos tenemos barreras, dificultades o limitaciones, lo que les debe ayudar a ser humildes, a tener paciencia, a ser perseverante, tenaces. Y hacer que los demás se involucren.

Pero las limitaciones de la edad no son excusa para no ser persona en un mundo que necesita verdades, coraje, visión y posibilidades. El mayor problema del anciano es sucumbir a las limitaciones.

La soledad

La soledad es el nuevo monasterio del anciano. Y con frecuencia no es elegida. A veces se asocia a aislamiento o separación, pero favorece el recogimiento y permite repensar la vida.

Y otros valores: La ancianidad, a pesar de la decadencia de las propias facultades, es fácil de sobrellevar, por el valor de los recuerdos. W Somerset Maugham. Conviene elegirlos y no convertirlos en una carga.

Para el anciano el futuro es un estado mental: unos dicen «no estoy para esas cosas» y otros empaquetan y se van a la India, a iniciar nuevos proyectos. En esa etapa el futuro es el ahora, que es lo que te queda de vida. No hay que preparar el futuro. Sería muy inteligente vivir toda nuestra vida así.

No se está acabado para la vida. En cualquier momento la mejor etapa de tu vida es en la que te encuentras. De hecho, la actitud es clave: El peligro de la vejez es que empecemos a actuar como ancianos.

Perder experiencias es aislarse y las actividades propias de la vejez, son todas; dependen más de la estructura mental que de la condición física. Algunas ideas las he tomado del libro de J. Cristtener, El don de los años

Ballesol: melodía sin arrugas que da vida a los años

«La edad es un tema de la mente sobre la materia. Si no te importa, no importa» o «envejecer es como escalar una gran montaña; mientras se sube las fuerzas disminuyen, pero la mirada es más libre, la vista más amplia y serena».

Estas dos reflexiones son algunas de las escogidas por los residentes de los tres centros Ballesol Alicante para significar lo que es para ellos el Día de la Personas Mayores que se celebra este 1 de octubre y que tiene como lema: «Caminando hacia el futuro; aprovechando los talentos, las contribuciones y la participación de las personas mayores en la sociedad».

Uno de los retos más importantes que afronta hoy una residencia Ballesol en Alicante - Playa San Juan, Via Parque y Costa Blanca Senior Resort- es el de «diseñar e implementar proyectos de envejecimiento activo que ofrezcan nuevas oportunidades asociadas a una demanda relacionada con la mejora de calidad de vida, la salud y el ocio», un reto diario que ha conseguido liderar y hacer referente en la Comunidad Valenciana Vicente Cuesta, director operaciones Ballesol zona mediterránea.

¿Cómo es la experiencia de envejecer en Ballesol? Un simple dato entre lo científico y lo curioso ha conseguido posicionar a Ballesol Alicante como referente en la apuesta por un envejecimiento activo y positivo.

«Los niños se ríen 400 veces al día, los adultos no más de cien. Aquí es diferente», aseguran los Tasoc (Técnicos de Animación Socio Cultural) de las diferentes residencias que han elaborado para este año una variada oferta de actividades e iniciativas para «conseguir más beneficios desde el plano psicólogico al físico».

Una carcajada activa «combate la depresión, sirve para eliminar el estrés y tiene un efecto rejuvenecedor» enumeran los profesionales. Este año se han hecho talleres de risoterapia, actuaciones musicales, talleres de repostería, cumpleaños, cuentacuentos, bailes de máscaras, de disfraces y diferentes excursiones.

Con motivo de la celebración del Día del Mayor, los tres centros residenciales de Ballesol en Alicante han diseñado una programación especial encaminada a poner en valor el trabajo diario de los profesionales del centro, y que completa las actividades conmemorativas del día del Alzheimer de la semana anterior.

«El objetivo específico de cada uno de los profesionales implicados en la atención de los residentes es mantener las capacidades y la participación activa en cada una de las áreas de intervención en nuestros mayores», resume Margarita Luzón, directora de Ballesol Playa San Juan.

Un trato especial para problemas de movilidad

La misión en Ortopedia Tram Hospital es contribuir a que sus pacientes tengan la mejor calidad de vida posible, reciban un trato especial para su recuperación física y emocional. Tienen claro que ser mayor no significa necesariamente dejar de tener una vida normal.

La vida hay que vivirla, y para ello trabajan, para ofrecerles soluciones a las dificultades que surgen, por grandes que sean.

Porque ante problemas de movilidad las soluciones son infinitas, desde las más sencillas como utensilios de cocina,cubiertos especiales, pastilleros, pijamas, sillas de ducha, ayudas para vestirse, haciendo de esta forma que el paciente sea lo más autónomo posible.

Un gran ejemplo es Paco, el paciente de la foto, que a pesar de su doble amputación disfruta del día a día. Esto resume gran parte de los servicios, aunque sin duda las personas que lo componen son la verdadera esencia de la empresa.

Servicios a domicilio para envejecer en tu entorno

A la mayoría de los mayores les inquieta la pérdida de autonomía y convertirse en una carga para los demás en caso de ser dependientes.

Actualmente son muchas las opciones que se pueden valorar: residencias, centros de día, estancias temporales o la asistencia a domicilio.

Esta decisión depende de las circunstancias de cada persona y de su forma de envejecer, siempre y cuando se tenga en cuenta que el aislamiento está considerado como una de las mayores causas de mortalidad.

En el caso de que el anciano reúna unas condiciones óptimas para vivir solo y su deseo sea ese, existe un amplio abanico de posibilidades para recibir el servicio de ayuda a domicilio.

Se trata de un servicio orientado a las personas y familias que presentan problemas para la realización de las actividades elementales de la vida diaria, proporcionándoles atención directa en el propio hogar mediante intervenciones que favorezcan su permanencia e integración en su entorno habitual.

La Generalitat Valenciana pone a disposición de los ciudadanos esta opción con el fin de favorecer la permanencia de las personas mayores en su domicilio y entorno socio-familiar, atender situaciones de crisis personal o familiar o colaborar con las familias cuando por sí mismas no puedan atender las necesidades del usuario.