Los murciélagos no suelen ser unos animales adorables para la mayoría de personas. Su aspecto y las leyendas que rodean a estos pequeños voladores los hacen, en ocasiones, temibles. En un gran número de ocasiones todos estos miedos, no se corresponden con el peligro real existente, sin embargo, siempre hay motivos para tomar precauciones.

Y es que, este verano dos personas han tenido que ser atendidas a consecuencia de mordeduras de murciélagos que portaban la rabia, según ha desvelado El País. Los afectados, una mujer de 59 años de edad en Valladolid y un joven de 19 en Huelva, fueron atendidos con un tratamiento antirrábico, que resulta imprescindible para evitar que la enfermedad llegue a ser mortal.

Ambos casos se produjeron en el mes de junio y solo con dos días de diferencia. A pesar de lo que pueda parecer, los expertos aseguran que la coincidencia no es significativa a nivel de estadísticas. "Puede ser una casualidad o el primer indicio de algo, pero no tenemos datos para extraer conclusiones", explica Elías Fernando Rodríguez, catedrático de Sanidad Animal de la Universidad de León.

Los casos registardos en España no son alarmantes. Desde 1987 se han dado 19 casos similares. En el caso de la mujer, el animal la atacó cuando ella intentaba abrir un armario de su casa y al hombre, en cambio, lo atacó cuando trató de apartar al murciélago de su gato.

Por suerte, los afectados, que fueron al hospital portando al murciélago, se han recuperado sin consecuencias. Algo digno de destacar, puesto que, tal y como explica el jefe de Información de Salud Pública de la Junta de Castilla-León, Rufian Álamo, "la rabia es mortal en prácticamente el 100% de los casos si llega a desarrollarse".

Por ello, Álamo recuerda de la importancia de que en un caso similar, "se lave bien la herida y se acuda de inmediato a un centro médico". Con especial atención a los niños, para que no jueguen con estos animales y si ocurre algo, avisen lo antes posible a sus padres, explica Álamo a El País.