Llega el verano y muchos se plantean realizar un blanqueamiento dental para lucir brillantes en estos meses.

Daniela Carranza, la codirectora del instituto Profesor Sada, ha preparado estas diez claves para que de manera natural los dientes estén blancos y no haya necesidad de procedimientos químicos.

1. Evitar el uso excesivo de blanqueadores que puedan llegar a dañar el esmalte.

2. Lavarse los dientes justo después de cada comida.

3. Usar complementos como el hilo dental y enjuagues.

4. Usar colutorios sin clorhexidina. Según explica la Doctora Carranza, "la clorhexidina, aunque es antibacterias, afecta al esmalte de los dientes con los que amarillea las piezas".

5. Mantener la boca hidratada y beber mucho agua, e incluso tomar chicles sin azúcar para favorecer la salivación.

6. Evitar alimentos que tiñan las piezas dentales como el café, el vino tinto, el té negro, refrescos, remolacha. "Su composición afecta a los dientes dejando restos en los dientes con lo que un uso prolongado hace que se empiecen a amarillear", cuenta Carranza.

7. Consumir abundante fruta, sobre todo manzanas, productos lácteos que aporten calcio.

8. Consumir fibra ya tiene un efecto abrasivo que ayuda a eliminar los restos de comida de la superficie de los dientes.

9. No fumar.

10. Realizarse una limpieza bucal una vez cada seis meses. "Las limpiezas bucales eliminan completamente la suciedad y las bacterias de la boca con lo que da una sensación mayor de blanqueamiento", detalla la codirectora del Instituto.

Pero si con estos consejos no se termina de lucir una sonrisa blanca y brillante, lo mejor es acudir al dentista y realizar un estudio en profundidad para saber que tratamiento sería más oportuno en cada caso.