Irina Shayk se ha convertido en la protagonista de la edición británia de la revista Vogue. La top model es la 'cover girl' del próximo mes de marzo, una sesión de fotos en las que Irina ha decidido abrir su corazón a todos los lectores de esta publicación de moda.

Y es que desde que ella y Bradley Cooper decidieron separarse tras cuatro años de relación, ninguno de los dos había hablado públicamente de su ruptura. Tratando de lidiar con los pormenores de esta situación, el foco de atención de ambos ha estado puesto en el bienestar de su pequeña Lea De Seine.

Ahora, Irina ha querido hablar alto y claro de cómo se ha sentido tras su ruptura con el oscarizado actor: "Creo que en todas las buenas relaciones sentimentales tú ofreces lo mejor y lo peor de ti. Es así como funciona la naturaleza humana. Por eso dos grandes personas no tienen por qué ser una gran pareja".

Además, la modelo valora muy positivamente al que fue su pareja y es padre de su hija: "En cualquier caso, hemos tenido mucha suerte de haber tenido lo que tuvimos juntos. La vida sin Bradley es un terreno totalmente nuevo para mí".

Una nueva vida para Irina que llega después de meses difíciles: "Es muy complicado encontrar el equilibrio entre ser una madre soltera y ser una mujer trabajadora que se gana la vida. Creedme, todavía hay días en los que me levanto pensando en que no sé que hacer porque creo que me estoy haciendo pedazos".

Unas declaraciones que no se parecen en nada a las que hizo cuando rompió con el futbolista Cristiano Ronaldo. En 2015, Irina decidió abrir su corazón para explicar lo que buscada en un hombre a raíz de su ruptura con el portugués: "Quiero un hombre fiel, honesto, un caballero que sepa cómo respetar a las mujeres. No creo en los hombres que nos hacen caer y sentirnos infelices, porque eso no es de hombres sino de niños", y añadió: "Pensé que había encontrado ese hombre ideal... pero no. Pienso que una mujer se siente fea cuando tiene al hombre equivocado a su lado. Yo me sentí fea e insegura".