La vacunación es un aspecto fundamental a la hora de preparar algunos viajes. Si nos hemos decidido por visitar determinadas zonas, debemos consultar el calendario de vacunas que tenemos que seguir. Las vacunas nos ayudan a prevenir enfermedades infecciosas. Muchas de estas enfermedades ya están erradicadas en Europa, pero no ocurre lo mismo con determinados destinos internacionales. De ahí, que sea necesario vacunarse antes de realizar determinados viajes.

Cada país requiere unas vacunas diferentes. Dependiendo del destino que hayamos elegido para nuestras vacaciones deberemos recibir unas vacunas u otras. La situación sanitaria de cada país es la que determinará qué vacunas deben suministrarnos antes de nuestro viaje. Por ello, se deberán consultar las fuentes sanitarias de cada destino para tomar las medidas preventivas necesarias y acudir, posteriormente, a un Centro de Vacunación Internacional.

También hay que tener en cuenta que no deberán ponernos las mismas vacunas si optamos por un viaje de aventura por nuestra cuenta, que si optamos por un viaje organizado. Los riesgos que se corren son diferentes en ambos casos y por tanto las precauciones a tomar también son distintas. Tampoco es lo mismo si vamos a estar en una zona urbana o en una zona rural, en este caso también las vacunas que recibiremos serán diferentes.

Normalmente, son los destinos exóticos los que más vacunas exigen. Estos suelen concentrarse en África, Sudamérica y Centroamérica, así como en el continente asiático.

Algunas de las enfermedades infecciosas más comunes en estos destinos y que requieren vacunación son las siguientes:

Cólera: se trata de una enfermedad bacteriana intestinal aguda. El cólera se transmite en agua y alimentos. Es una infección poco común entre los turistas, si se han recibido las vacunas contra la misma antes de viajar y se han tomado las precauciones higiénicas adecuadas.

Fiebre amarilla: conocida también como 'vómito negro', es una enfermedad vírica aguda. La fiebre amarilla es transmitida por los mosquitos y con las vacunas requeridas en orden no es común entre los turistas.

Fiebre tifoidea: esta infección bacteriana se transmite también por el agua y los alimentos. Su incidencia es muy baja en países desarrollados gracias a las vacunas, pero sí suele darse en el Tercer Mundo.

Hepatitis A y B: las mejores condiciones higiénicas de muchos destinos y las vacunas están haciendo que la hepatitis A tenga una incidencia muy baja. En el caso de la Hepatitis B, que se transmite por vía sexual o transfusiones de sangre, la incidencia es más elevada en las zonas de riesgo.

Meningitis: África Subsahariana, el sudeste asiático y Oriente Medio son las zonas en las que hay que prestar más atención ante esta infección aguda. La mayor incidencia de esta enfermedad suele darse en los cambios de estación.

Poliomielitis: se trata de una infección viral que puede afectar al sistema nervioso y provocar parálisis. Se transmite en el contacto directo de persona a persona.

Rabia: es una enfermedad vírica que ataca al sistema nervioso. La rabia se transmite por contacto directo entre el hombre y algunos animales, ya sea por un bocado o una secreción.

Tétanos: se trata de una enfermedad producida por una toxina que se cuela en el organismo humano a través de heridas o contenido mucoso.