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Orihuela rehabilita el área recreativa de Pinar de Bonanza y quita la pernocta

El espacio estaba abandonado desde 2014 y el Ayuntamiento ha optado por no licitar de nuevo su explotación

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Orihuela rehabilita el área recreativa de Pinar de Bonanza

El área recreativa de Pinar de Bonanza dejará de ser el único alojamiento en la Sierra de Orihuela. De hecho, desde finales de 2014, nadie ha pernoctado en las cabañas de madera instaladas para tal fin y gestionadas entonces por una empresa. Desde que el Ayuntamiento rescindiera el contrato por incumplimientos con la última adjudicataria, hace seis años, este área recreativa se encontraba en estado de abandono y sometido al vandalismo que ha destrozado gran parte de las instalaciones, que ahora serán rehabilitadas pero con un proyecto diferente por parte de la Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Orihuela, que elimina las pernoctaciones en la zona y su explotación y mantenimiento por parte de una empresa externa, y será el consistorio oriolano el que se ocupe desde ahora de este espacio.

Así, el proyecto que está desarrollando esta concejalía, según ha podido saber este diario, consiste en la rehabilitación integral del área recreativa, de 4.500 metros cuadrados, a la que se añadirán merenderos y nuevos aseos. Las cabañas habitables dejarán de serlo. Cinco de ellas, las que estaban en mejor estado de conservación, se han trasladado al Soto I6 del río Segura, donde el Ayuntamiento tiene previsto inaugurar 32 huertos urbanos, tal y como adelantó este diario. Las cabañas serán allí rehabilitadas y se usarán para guardar los aperos, tanto quienes obtengan el permiso para explotar esos huertos, como el propio Ayuntamiento.

El resto de cabañas, otras cuatro, se van a rehabilitar para su uso en la propia área recreativa. Así, las que están en peor estado quedarán diáfanas, otra será para aseos y otra se usará como cenador. Todas ellas están en un estado lamentable, con cristales rotos, sin ventanas y con la cerradura de las puertas inservible. Una vez restauradas, podrán ser usadas por quien quiera pasar el día en esta área recreativa gratuitamente, siempre y cuando soliciten un permiso a la Concejalía de Medio Ambiente, de manera presencial o por internet, y firmen una declaración responsable a la entrega de las llaves de las cabañas que hayan pedido usar. En todos los casos, estará prohibido pasar allí la noche.

Okupas

El edil de Medio Ambiente, Dámaso Aparicio, explicó a preguntas de este diario que ha optado por no volver a sacar a licitación la explotación del área recreativa «por eficiencia y eficacia». Aparicio señaló que los vecinos de la zona se encontraban «muy preocupados» por los actos vandálicos y los okupas que han tenido las cabañas en estos años «y temían la degradación de la zona». «Ahora será un espacio libre y gratuito para el disfrute de todos, un espacio verde más en la ciudad», añadió. La intención del Ayuntamiento es que este espacio de la Sierra de Orihuela, cuya rehabilitación y restauración de las cabañas supone una inversión de 47.531 euros, se asimile a otros, como el que hay en la Sierra de Redován o la Cueva Ahumada de Callosa de Segura.

El Ayuntamiento se ocupa del mantenimiento de Pinar de Bonanza en virtud de un acuerdo en 2003 con la Generalitat, que es quien tiene la titularidad del suelo. Está previsto que su rehabilitación y acondicionamiento culminen en septiembre.

Con unas impresionantes vistas de Orihuela y rodeada de una exuberante vegetación a de pinos y matorral, el área recreativa de Pinar de Bonanza con cabañas habitables se inauguró en 2009. La entonces alcaldesa, Mónica Lorente (PP), dijo que era uno de los proyectos de los que se sentía más orgullosa tras concluir la puesta en valor de las laderas de la Sierra de Orihuela, que costó 276.938 euros. Años después, cualquiera que accediera a este complejo venido a menos del paraje de San Cristóbal en la pedanía de Raiguero de Bonanza, se encontraba un panorama diferente, con ventanas rotas, cerraduras reventadas, grafitis en puertas interiores, picaportes arrancados y equipamiento eléctrico y sanitario saqueado.

En 2009 se inició el primer contrato para la gestión de estos alojamientos rurales y su conservación por 55.500 euros anuales, más IVA, y con unos precios fijados por el Ayuntamiento para los refugios: los de 25 metros cuadrados (para seis personas) de 40 euros la primera noche, 75 cuando fueran dos y 110 euros si se contrataban tres y las cabañas de 12 metros cuadrados a partir de 30 euros. Se hizo una adjudicación provisional en un procedimiento negociado sin publicidad que ganó «Rincón de Bonanza, Educar S.L.L». Pero el complejo permaneció casi dos años cerrado por carecer de los permisos pertinentes de la Generalitat hasta que en 2013, gobernando Los Verdes y PSOE, volvió a salir a licitación con un presupuesto base de 72.000 euros anuales, más IVA, por dos años, a «Loespama del Mediterráneo S.L.», pero en 2014 se le rescindió el contrato.

El PSOE habla de «desmantelamiento» del paraje municipal

La portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Orihuela, Carolina Gracia, calificó de «desmantelamiento» la retirada de las cabañas que se encuentran en el área recreativa de Pinar de Bonanza. Gracia criticó que el edil de Medio Ambiente, Dámaso Aparicio, no haya dado información sobre las intenciones de su concejalía de llevarse las cabañas al soto del río. Gracia pidió a Aparicio que se replantee el desmantelamiento porque «ahora en esta situación es más necesario que nunca que la ciudadanía cuente con espacios seguros al aire libre y estas dependencias con merenderos y las cabañas pueden serlo».

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