La movilización de un grupo de vecinos de Las Espeñetas ha paralizado las obras iniciadas por el Ayuntamiento de Orihuela para dar mayor capacidad de desagüe de aguas pluviales a los barrios aledaños a la sierra. Los residentes han reclamado que el municipio reconsidere la actuación porque interpretan que «viste un santo para desvestir a otro». Es decir, se pretende resolver el problema de inundaciones de una zona de la ciudad y se traslada a otra. La presión sobre el equipo de gobierno ha surtido efecto y los vecinos van a mantener una reunión para analizar alternativas al proyecto de emergencia que estaba llevando a cabo el Consistorio.
Tanto estos vecinos del barrio oriolano de Las Espeñetas, como residentes en Rabaloche y Capuchinos se ven afectados por las inundaciones de bajos y fachadas no solo cuando se produce una gota fría, también con tormentas. Maite Rubio, una de las vecinas que se ha entrevistado con los responsables municipales, explica que, sin ser técnicos, consideran que lo más eficaz para evitar unos daños con origen en los barrancos de la ladera de la Sierra de Orihuela sería encauzar todo el caudal generado desde los barrancos hasta Ociopía, con un colector de gran capacidad, desde esa zonas de torrentes situadas en la zona alta del municipio hasta el río Segura. Creen que el Ayuntamiento y la adjudicataria no quieren plantearse esta alternativa por el coste económico que entraña. El PSOE local ha respaldado la petición vecinal.
