La Policía Local de Almoradí detuvo el pasado sábado a un hombre por saltarse el confinamiento por duodécima vez desde que se decretó el estado de alarma el pasado 13 de marzo. Los agentes que realizaban la vigilancia preventiva para el control de la restricción de movimientos por el estado de alarma vieron a un hombre apoyado en la pared sobre una esquina donde confluyen dos calles de la localidad que estaba fumando un cigarrillo. Los policías le preguntaron por el motivo por el que estaba en la vía pública que, lejos de justificarlo, les dijo, de manera altanera y desafiante, que "tenía que fumar" y que "saldría a la calle todas las veces que quisiera", mientras realizaba ademanes descompuestos con sus brazos, según informa la Policía Local de Almoradí en sus redes sociales.

Tras identificarlo, los agentes comprobaron que contaba con siete denuncias anteriores por parte de la Policía Local y con otras cuatro por parte de la Guardia Civil por los mismos hechos, por lo que fue detenido por incurrir en un delito de desobediencia grave reiterada a la medida de confinamiento legalmente establecida. El arrestado fue trasladado al puesto de la Guardia Civil de Almoradí para su posterior puesta a disposición judicial.