La Guardia Civil ha detenido en Almoradí a un hombre, español de 47 años, que se saltaba el confinamiento por la pandemia de coronavirus para cometer delitos. El detenido fue denunciado hasta cinco veces por incumplir la restricción de movilidad establecida por el estado de alarma. Pero su actitud insolidaria tenía un fin perverso: robar. Los agentes sospecharon de él tras la quinta vez que le sorprendieron deambulando por las calles sin un fin justificado. En esa ocasión se mostró muy agresivo, acometiendo contra los agentes que le pararon para identificarle. El individuo, incluso, les azuzó con un perro de raza peligrosa, hecho que conllevó a su detención por un delito de atentado a agente de la autoridad y un delito de desobediencia.

Las investigaciones realizadas por la Guardia Civil permitieron conocer que el verdadero motivo del incumplimiento del confinamiento no era otro que el de cometer delitos. En una semana se le han podido imputar dos hurtos, uno en un vehículo y otro en una vivienda, y un delito de robo con fuerza en un establecimiento comercial. En este último, tras cortar la valla, sustrajo una máquina hidrolimpiadora que fue arrastrando por las calles de Almoradí, cuyas imágenes fueron grabadas a plena luz del día por varios vecinos.

Por todo ello, se le imputan los supuestos delitos de atentado a agentes de la autoridad, desobediencia, robo y dos hurtos, además de las cinco denuncias por incumplimiento de la restricción de movilidad establecida por el estado de alarma.

En el marco del estado de alarma, decretado por el Real Decreto 463/2020, la Guardia Civil recuerda que continúa velando por que se cumplan las restricciones, sin desatender la seguridad ciudadana.