El Ayuntamiento de Rojales unificará la limpieza viaria de las urbanizaciones y la del casco urbano, que hasta ahora se prestan de forma separada. Una mercantil, Ginssa, se encarga desde hace más de 10 años de limpiar las calles de las urbanizaciones del extrarradio del municipio, como es el caso de Ciudad Quesada, mientras que es personal municipal el que se ocupa de la limpieza de las calles más céntricas, las del casco urbano. Una situación que el consistorio, gobernado por el PSOE, quiere cambiar para que sea una mercantil la que se ocupe de la gestión indirecta del servicio público de limpieza viaria en todo el municipio, que tiene una población en torno a los 17.000 habitantes.
El pliego ha salido ya a licitación por 2.678.230 euros (impuestos incluidos). Así, el valor estimado del contrato asciende a 3.347.787 euros (IVA incluido) por cuatro años de prestación e incluye una posible prórroga de otro año más. El pliego señala que la limpieza se intensificará los fines de semana y festivos en aquellas zonas donde el tránsito de peatones es continuo, donde suele haber gran actividad o concentración de personas, en las zonas de ocio y diversión juvenil multitudinaria, o en aquellos otros espacios públicos que la empresa licitante considere oportuno. Todo para mejorar el servicio que se presta actualmente.
El alcalde de Rojales, el socialista Antonio Pérez, asegura que el pliego es «ambicioso» y defiende la fórmula empleada de unificar la limpieza en todo el término municipal, en lugar de separar las urbanizaciones y el casco urbano. «Es un proyecto muy elaborado y trabajado para que las 500 calles y plazas de Rojales estén limpias todo el año», señaló Pérez. «Rojales es un municipio bastante complejo, con más de 200 kilómetros de calles, y los técnicos han hecho un pliego muy completo donde se especifica hasta la frecuencia mínima de barrido y su tipo», indicó.
La empresa que actualmente se encarga de la limpieza viaria de las urbanizaciones presta el servicio actualmente mediante una prórroga forzosa concedida el pasado mes de julio y supeditada a la licitación de un nuevo contrato. La mercantil lleva más de una década ocupándose de limpiar las calles de las urbanizaciones con un pliego que ha quedado obsoleto, como reconoce el regidor, «ya que en todo este tiempo han aumentado, y mucho, el número de viviendas y las calles de las urbanizaciones por su crecimiento urbanístico y la exigencia de limpieza es mayor». El Ayuntamiento de Rojales ha asumido en los últimos años una serie de viales de los que históricamente se encargaban otras administraciones como la Generalitat y la Diputación.
Pliego
Los empleados municipales que se encargan de la limpieza viaria en el casco urbano pasarán al área de jardinería del ayuntamiento una vez adjudicado el nuevo contrato a una empresa. El pliego de limpieza viaria incluye el barrido manual, el mecánico y el mixto, así como el baldeo de calles, el mantenimiento de las papeleras, la limpieza del mobiliario urbano y los servicios especiales, tales como ferias, fiestas o actos públicos. También se dedica un apartado aparte para concretar los aspectos de limpieza del mercado semanal, del cementerio municipal y de los polígonos industriales.
En Rojales, al contrario que en la mayoría de municipios, el servicio de limpieza viaria se presta aparte del de recogida de basuras y residuos sólidos urbanos, que está adjudicado a una empresa. Para Antonio Pérez de esta forma se consigue un mejor servicio «porque damos la oportunidad de que sean dos empresas distintas, especializadas cada uno en su área, las que presten esos dos servicios».
