La segunda fase del proyecto de concienciación ambiental «Desplastifícate» ha comenzado. Una iniciativa impulsada por el Colegio Manuel Riquelme de Hurchillo educativo en colaboración con el Ayuntamiento de Orihuela en el que participarán 15 colegios públicos y concertados del casco, Costa y pedanías de Orihuela. El año pasado se implicaron 3.000 alumnos. Ahora serán más de 8.000 los que van a participar activamente, según indicaron ayer el director del centro Joaquín Marzá y el concejal de Medio Ambiente, Dámaso Aparicio. A la presentación también acudieron la directora del IES El Palmeral, Verónica Segura, el director del CEIP Andrés Manjón, Santiago Ferrández, el coordinador del proyecto, Ariel Platas, y el coordinador del proyecto UNESCO del Colegio Diocesano San José Obrero, José Miguel Pardo.
«El profesorado ya tiene conciencia de que tenemos que cambiar nuestra forma de actuar, nuestra forma de vivir y comportarnos con el medio ambiente. Es una realidad y ya sabemos todos que estamos en una etapa de emergencia climática»,dijo la directora del IES El Palmeral. «Desplastifícate» busca fundamentalmente concienciar a alumnos y familias sobre la contaminación que genera el plástico en la actualidad, con el objetivo de reducir su uso diario y cuidar el medio ambiente.
Verdina
Esta iniciativa educativa cuenta con el apoyo de la UNESCO y se difundirá mediante la representación de un muñeco de plástico con forma femenina llamado «Verdina», que se encargará de transmitir un mensaje de alerta sobre el plástico a los diferentes colegios y centros participantes. «Verdina irá por todos los centros con ese mensaje y recordando a todos que debemos dejar de usar los plásticos, de hecho, la legislación que entrará en vigor el 1 de julio de 2021 va a prohibir su venta en la Comunidad», explicó Aparicio. Marzá agregó que en «la idea final peinaremos el proyecto para conseguir que el 90% de niños y niñas eliminen el plástico de un solo uso en el almuerzo, y este año también incrementaremos la eliminación de las botellas de plástico en los colegios».
El primer colegio que entró en la red UNESCO en Orihuela fue el San José Obrero y como ha expresado su coordinador «nos toca poner a cada uno de nosotros el empeño en hacer ver a los demás que un simple gesto puede ayudar muchísimo». «Pensamos que este proyecto es muy positivo. Es muy gratificante ver como incluso los propios niños corrigen a veces a sus padres o incluso a algún maestro cuando tiran un plástico donde no corresponde», señaló el director del CEIP Andrés Manjón.
