Tres solicitudes a Alcaldía y una queja al Síndic de Greugues de la Comunidad Valenciana han hecho falta para comenzar a normalizar la entrega de documentación al grupo socialista de Callosa de Segura por parte del equipo de gobierno - PP y Cs- derivada de la Junta de Gobierno Local, principal órgano colegiado del día a día de la gestión del Ayuntamiento. Todo, seis meses después de iniciarse el mandato en el municipio. Lo que debería ser una dinámica normalizada - el Reglamento Orgánico de Funcionamiento (ROF) establece un plazo de 10 días para entregar a todos los concejales de la corporación copia de las actas Junta Gobierno Local- se había convertido, para el grupo municipal socialista, «en una carrera de obstáculos en cuanto a dilación, retrasos y evasivas por parte de los grupos popular y Ciudadanos para la entrega al grupo socialista de la documentación necesaria para poder desarrollar su labor».

En el informe de justificación emitido por el Ayuntamiento de Callosa de Segura al Síndic, el alcalde callosino, el popular Manuel Martínez, reconoce que «es cierto que hasta la fecha no se ha procedido a hacerle entrega de la documentación». Martínez justificó a este diario el no haber entregado la documentación a la oposición hasta ahora «porque ha habido problemas, que ya hemos solucionado» y negó que sea «una venganza» en relación a la queja de los populares en el mandato pasado -cuando gobernaba el tripartito de PSOE, EU y Somos Callosa- «de que no se entregaba al PP la documentación y así lo denunciamos en su día». El regidor asegura que «cuando me llegó la queja del Síndic ya teníamos toda la documentación preparada para entregársela al PSOE, y así se lo comunicamos al Síndic».

No fue hasta el 22 de enero cuando los ediles del grupo socialista recibieron una comunicación de la disposición en las dependencias municipales de la documentación solicitada, donde al personarse «se nos facilitó una copia en papel de las actas celebradas desde julio a diciembre de 2019», informó el portavoz del PSOE, Fran Maciá. Los socialistas revisarán ahora todas las actas de los seis meses de gobierno. Maciá criticó que «hicimos constar que las actas deben ser individualizadas por concejal, no una por grupo municipal, y que usar formato papel en una administración moderna no es práctico a no ser que se pretenda ralentizar su consulta». Para los socialistas, y así se lo han dicho al Síndic, «se ha pretendido retrasar, dificultar y entorpecer la labor de consulta de esta documentación mediante acciones dilatorias por parte de un gobierno que esgrimía transparencia y regeneración».