La subdirectora general de Epidemiología de la Conselleria de Sanidad, Hermelinda Vanaclocha, defendió la actuación de los responsables sanitarios del Hospital de Torrevieja que activaron el protocolo de actuación ante un posible caso sospechoso de infección por el nuevo coronavirus de Wuhan en una turista islandesa que llegó al centro con síntomas compatibles.

La alerta ha desactivó al comprobar que la turista islandesa ni siquiera había viajado a China en su viaje por varios países asiáticos. Vanaclocha defendió que el jefe de guardia "hizo lo que tenía que hacer" porque había una sospecha: "Si es una persona con síntomas y que parece que ha venido de China, nuestra obligación es activar el protocolo". "Si hay una posibilidad por pequeña que sea a la persona se le pone una mascarilla y se la aísla en una habitación y mientras empezamos a hacer investigación a nivel de salud pública para ver si es un caso o no", añadió.

Ni español, ni inglés ni francés

El problema, según la responsable de Sanidad, estuvo en la barrera idiomática ya que ni la paciente (una mujer islandesa de 66 años) ni su pareja hablaban "ni español, ni inglés ni francés. (A los profesionales) les pareció entender que habían estado en China pero no han estado ni en Wuhan ni en su provincia, por lo que se ha desactivado el protocolo" al ser esta una de las condiciones para ser considerado como casos sospechoso.

Según Vanaclocha, más allá de esta alerta, que resultó falsa, no se ha producido ningún otro episodio de importancia pero, si lo hubiera, "los hospitales valencianos están preparadísimos" ya que como recordó la responsable de la administración la red de vigilancia, en la que trabajan epidemiólogos, preventivistas, microbiólogos e infectólogos tienen toda la información sobre cómo se tiene que trabajar que se ha consensuado en el Ministerio de Sanidad siguiendo directrices de la OMS "y llevamos 15 años trabajando" desde la primera gran epidemia del SARS (sindrome respiratorio agudo grave) en 2003. "Fue nuestro rodaje y los médicos ahora saben lo que tienen que hacer, completamente", ha asegurado.

La subdiretora general de Epidemiología no descartó que pudieran llegar otros casos sospechosos ya que existía cierta probabilidad pero "teniendo en cuenta lo grande que es China, la cantidad de habitantes que tiene y el nivel de comercio, esto es muy poco", razonó.