Lo que era una planta de tratamiento de residuos podría convertirse en una instalación de transformación de residuos sólidos de depuradora -lodos- para su uso como fertilizante. Con la salvedad que la Generalitat dio autorización para lo primero pero la empresa promotora del proyecto ha cambiado su objetivo a la hora de presentar la licencia ambiental en el Ayuntamiento. Objetivo más ambicioso pero con un impacto ambiental también mucho mayor, según ha alertado la Asociación de Vecinos de San Miguel de Salinas «San Miguel Arcángel». Este colectivo vecinal ha presentado alegaciones en contra de la concesión de licencia ambiental para la apertura de esta «supuesta planta de tratamiento y valorización de podas procedentes de la agricultura y la jardinería porque el proyecto ha mutado hacia una actividad de tratamiento de lodos de depuradora».
A estos vecinos les preocupa la ubicación de la actividad a escasos cientos de metros del embalse de la Pedrera y la posible afectación a sus valiosos recursos hídricos. El reservorio de agua dulce más importante de la provincia, con capacidad para albergar 260 hectómetros cúbicos y que se abastece con agua del trasvase Tajo-Segura, agua desalinizada del mar en Torrevieja y con excedentes del río Segura durante las crecidas. Un agua que abastece a media provincia para suministro urbano y a los agricultores de la Vega Baja y todo el campo de Cartagena. La finca Lo Torregrosa, en las inmediaciones de la urbanización Lo Rufete, sobre una superficie de unos 1.700 metros cuadrados. La empresa impulsora del proyecto solicitó en 2013 se solicitó la Declaración de Interés Comunitario (DIC). Un procedimiento urbanístico que permite autorizar actividades en suelo rústico. La finca escogida está en suelo no urbanizable común ecológico. El proyecto original fue el de una planta para el tratamiento y valorización de podas vegetales para la fabricación de pellets para calderas domésticas y los restos se derivarían a su conversión en abono para la agricultura mediante compostaje de restos vegetales procedentes «única y exclusivamente de fuentes agrarias o silvícolas en el que no está prevista la mezcla con ninguna otra materia que no sea vegetal».
El Ayuntamiento en 2017 solicitó información sobre la necesidad de tramitar el procedimiento de evaluación de impacto ambiental a la dirección general de Evaluación Ambiental. La respuesta fue que por las características del proyecto, la actividad se incluía en el Anexo II de la Ley de Evaluación de Impacto Ambiental y que, por tanto, «no procedía este tipo de valoración». Las actividades del Anexo II están sometidas a licencia ambiental y el órgano sustantivo es el Ayuntamiento.
Mutación
El proyecto, ahora presentado al trámite en el ámbito municipal para la licencia ambiental -que loverifica antes de la licencia de obra- no concuerda con el original. Aunque el título del proyecto habla de licencia ambiental «para una planta de valorización y tratamiento de podas», el contenido lo que plantea «es una planta de compostaje de lodos procedentes de depuradora. No se especifica el volumen de lodos, origen o toxicidad de los mismos. Este proyecto, ahora sí tendría encaje en el Anexo I, donde el órgano competente es la dirección general de la Consellería de Agricultura -trámite que se ahorrado la empresa eludiendo su objetivo en el DIC.
La asociación ha solicitado la denegación de la concesión de la licencia ambiental «por el evidente cambio del proyecto para el que se solicitó la DIC y sobre el que se han basado todos los informes y consideraciones medioambientales». Además la entidad insiste en alertar sobre la proximidad al pantano de la Pedrera «y los riesgos que para la salud pública de la población supone una instalación de este tipo».
